Secciones
Servicios
Destacamos
Han vuelto a casa, a sus rincones, a sus jaulas o a sus cojines favoritos. Han vuelto a ocupar el lugar que les dimos cuando ... nos creímos invencibles. Y lo han hecho sin rechistar.
Gracias a ellos hemos corrido, gritado, reído hasta perder el aire, han sido ellos los que rebajaron los picos de ansiedad que casi nos vuelven locas en la pandemia y solo ellos nos devolvieron a la realidad de no ser unos egoístas.
La soledad fue a menos también y el miedo casi desaparece por la compañía que se explica desde la lealtad, qué gran valor para estos tiempos en los que la pandemia ha dejado al descubierto los intereses de muchos, ¿verdad?
Por eso, después de todos los reconocimientos obligados al personal imprescindible que se merecen, por supuesto, todos los que han contribuido de manera esencial a que pasemos de etapa, creo que llega el momento de hacer otro homenaje más, a estos héroes peludos, con picos, plumas, patas varias y tamaños infinitos.
Merecen un homenaje público... y merecen más. También una ley que los proteja de verdad ante tantos desalmados que solo los consideran un objeto más de la casa, cuando en realidad han sido nuestros más firmes aliados en la felicidad de la vida.
Si no lo impide ninguna estupidez tipo 'veto parental', igual en un futuro no muy lejano podremos tener informativos libres de noticias de abandonos y maltratos a animales y que por fin, todos a una, señalemos como animales a los que les hacen sufrir.
Cuídenlos, porque son héroes, porque son amor. Y el amor es lo más grande del mundo. Miau.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Marc Anthony actuará en Simancas el 18 de julio
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.