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No todo está saliendo a pedir de boca en el UCAM en este tramo final del mercado estival de fichajes. Pedro Reverte, su director deportivo, sigue en busca de ese delantero centro que acompañe a Nuha Marong en la plantilla que dirige José María Salmerón. Pero no solo en el primer equipo hay asuntos candentes y que están suponiendo un dolor de cabeza para los intereses universitarios. Entre el primer equipo y el filial hay un asunto que atormenta a los directivos y técnicos del conjunto azulón.
Es el caso de Karim Chaban (Marsella, 21 años). El futbolista francoargelino lleva días sin aparecer por los entrenamientos del club universitario, pese a que tiene contrato y que comenzó la pretemporada a las órdenes de Salmerón. De hecho, se ha fugado y no está en Murcia desde hace quince días. Pero ni siquiera ha avisado de que ha dejado la ciudad.
Al parecer, el jugador está muy enfadado con la entidad universitaria por lo ocurrido en las últimas semanas. Chaban era uno más en las primeras sesiones de trabajo del curso 2021-22 que se han estado llevando a cabo con diferentes jugadores del filial, como es su caso, para completar el grupo. Con el paso de los días y el inicio de la precampaña para los máximos representantes de la cantera, entrenados por el oriolano Pato, se ha ido torciendo la relación de Karim con el UCAM.
En el primer amistoso que el filial tuvo que disputar en Alicante, el día 11 de agosto contra el Hércules B, todo se vino abajo. Ese mismo día, en una comunidad autónoma diferente, la primera plantilla disputaba un amistoso en la ciudad deportiva Andrés Iniesta, contra el Albacete. La entidad decidió que Karim Chaban viajara con el filial y no con los pupilos de José María Salmerón, lo que enfadó mucho al marsellés.
El jugador mostró su descontento con la decisión y se puso en rebeldía. Un día después, cogió un vuelo hacia Francia, en dirección a su Marsella natal, donde ya lleva 15 días. De momento, el futbolista se niega a aparecer por aquí y quiere salir, sea como sea, del UCAM. En el club, como no puede ser de otra manera, no dan crédito ante la situación creada por el marsellés. La dirección deportiva, encabezada por Pedro Reverte, no tiene la intención de dejar salir a Chaban, y estas actitudes están entorpeciendo, sin más remedio, la relación por las dos partes.
Karim Chaban es un futbolista con mucho potencial y al que la secretaría técnica del UCAM le echó el guante cuando este militó en las filas del Águilas. Con el equipo costero, jugó hasta seis partidos en la 2020-21 y demostró que era un atacante diferencial. Llegó el pasado mes de enero a la escuadra murciana y únicamente se escucharon alabanzas sobre el galo. Resultó importante en el filial de Tercera División y, tanto fue así, que el pasado mes de abril no se quiso demorar más la renovación de Karim Chaban, al que se amplió el contrato hasta junio de 2023.
El jugador, con nacionalidad argelina, se desenvuelve con maestría en todas las zonas del ataque, aunque donde más se le ha visto es como extremo. Formado en las bases del Rennes, también vistió las camisetas del Olympique de Marsella o el Andrelecht en sus categorías inferiores. El colofón de Chaban, que atrae muchas miradas y seguramente tiene ofertas encima de la mesa, son sus internacionalidades con las selecciones sub 21 y sub 23 de Argelia.
Karim pensará que su bagaje como internacional y el buen rendimiento mostrado en Tercera División le dan para dar mucho más que seguir una temporada más en el filial universitario. Pretendientes no le faltarán. Seguramente tenga razón, pero no vendría mal que alguien le enseñe que la mejor forma de hacerse un hueco en la plantilla está en el césped y no declarando la guerra por su cuenta de forma extradeportiva. Está desaparecido y eso no favorece a que se llegue a una salida amistosa.
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