El truco para limpiar el doble cristal del horno sin necesidad de desmontarlo

En nuestras casas hay rincones que parecen prácticamente inaccesibles, lo que dificulta su limpieza y permite la acumulación de suciedad. Ejemplos comunes incluyen los rieles de las ventanas, la parte exterior de las persianas, o el polvo que se acumula debajo de las puertas. Sin embargo, existen trucos efectivos que pueden ayudarte a facilitar estas tareas y lograr un hogar más limpio y acogedor.

Los rieles de las ventanas suelen acumular suciedad, polvo y residuos difíciles de retirar debido a su diseño estrecho y complicado. Para limpiarlos, utiliza una mezcla de agua tibia, vinagre y una gota de detergente. Aplica esta solución con un pulverizador, déjala actuar unos minutos, y luego utiliza un cepillo de dientes viejo para alcanzar los rincones más pequeños. Para terminar, pasa un paño húmedo o una bayeta para eliminar los restos.

La parte exterior de las persianas, que suele estar expuesta al polvo y la contaminación, también requiere atención especial. Una manera sencilla de limpiarlas es envolver un par de pinzas para ropa con trapos de microfibra, sujetarlos con gomas elásticas, y pasarlos por las láminas con una solución de agua y vinagre. Esto permite una limpieza profunda sin complicaciones.

El horno es otro de los elementos más complicados de mantener impecable. Los restos de comida quemada y grasa incrustada en su interior pueden ser un verdadero reto, pero existe un truco viral que lo deja como nuevo con mínimo esfuerzo.

Este método, que ha ganado popularidad en redes sociales, requiere una simple pastilla de lavavajillas. Coloca la cápsula en un recipiente resistente al calor, agrega un litro de agua hirviendo y ponlo dentro del horno. Luego, ajusta el horno a 200 grados y déjalo actuar durante una hora. Tras ese tiempo, apágalo y deja la puerta cerrada por 20 minutos más para que el vapor penetre en la suciedad. Por último, limpia el interior con un paño y un detergente específico para hornos. Los resultados te sorprenderán.

El doble cristal del horno, diseñado para aislar mejor el calor, también puede acumular grasa y restos de alimentos. Si tu horno tiene aberturas accesibles, puedes limpiarlo sin desmontar nada. Para ello, necesitarás un plumero desmontable con funda. Humedece la funda y aplícale un limpiador multiusos.

Introduce el plumero por las rendijas del cristal y pásalo varias veces para eliminar los restos acumulados. Este método es sencillo, rápido y eficaz, dejando tu horno impecable en cuestión de minutos.

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