El truco casero para recuperar el relleno de tu abrigo de plumas si se ha estropeado al meterlo en la lavadora

En invierno, una de las prendas imprescindibles para salir de casa es el abrigo. En el mercado existen diferentes modelos pero, sin duda, uno de los más eficaces para combatir las bajas temperaturas son los chaquetones de plumas. Sin embargo, a pesar de sus ventajas en cuanto a capacidad para mantener el calor, su limpieza puede resultar un desafío.

Aunque estamos acostumbrados a lavar la mayoría de nuestra ropa en la lavadora, hay prendas en las que esto no se recomienda, y entre ellas se encuentran los abrigos de plumas. Los programas de lavado de este electrodoméstico pueden dañarlos, apelmazando las plumas o incluso deformándolos. Esto no significa que esté terminantemente prohibido lavarlos en la lavadora pero, en caso de hacerlo, es importante tomar precauciones.

Por ejemplo, se recomienda lavarlos solo un par de veces al año y revisar siempre la etiqueta de la prenda para conocer las instrucciones específicas de lavado y secado. Además, es aconsejable vaciar todos los bolsillos para evitar que objetos pequeños dañen el tejido, cerrar las cremalleras y dar la vuelta al chaquetón para protegerlo durante el lavado.

Es preferible lavar el chaquetón de plumas solo, sin mezclarlo con otras prendas, y utilizar un detergente especial para ropa delicada o específico para plumas. No se debe usar suavizante ni lejía, ya que estos productos pueden dañar el tejido o alterar la capacidad de aislamiento del plumón. En cuanto al ciclo de lavado, se recomienda seleccionar un programa delicado, con agua fría, y ajustar el centrifugado a menos de 400 revoluciones por minuto para evitar que las plumas se apelmacen.

Si desconocías estas recomendaciones y has notado que el relleno de tu abrigo se ha visto afectado durante el lavado, hay un truco que puede ayudarte a devolverle su forma original.

La creadora de contenido Lucía Lipperheide (@home.styles en Instagram) ha compartido en sus redes sociales un 'tip' que puede solucionar este problema. La clave está en introducir el abrigo en la secadora con un programa para prendas delicadas después de sacarlo de la lavadora. Además, recomienda añadir en el tambor dos pelotas de secado, lo que ayuda a esponjar las plumas. Con este método, asegura que el abrigo parecerá «recién comprado».

Para quienes no disponen de secadora en casa, propone una alternativa, aunque advierte que el proceso es más largo y «no quedará igual». En este caso, se necesita un secador de pelo, que se debe introducir por el interior del abrigo mientras se le dan golpes suaves con una percha para redistribuir el relleno.

Para eliminar manchas de forma sencilla sin tener que meterlo en la lavadora, basta con mezclar agua y amoníaco a partes iguales. Luego, humedece una bayeta de microfibra con esta solución y frota suavemente sobre la mancha. La experta Begoña recomienda utilizar una bayeta nueva o casi nueva para aprovechar su capacidad electrostática. Una vez aplicada la mezcla, solo hay que esperar a que la zona tratada se seque para comprobar cómo la mancha desaparece.