Recupera tu maquillaje en polvo roto: el truco para no desperdiciarlo y sin utilizar alcohol

Ya sea que uses tu maquillaje de manera diaria o solo en ocasiones especiales, abrir tu neceser y encontrarte con que tus productos en polvo se han hecho pedazos puede convertirse en un verdadero drama. No solo porque esos polvos, coloretes o bases ya no se pueden aplicar correctamente, sino porque comprar un nuevo producto representa un gasto inesperado. Además, a nadie le gusta tirar algo que, aunque sea una pequeña cantidad, podría haberse aprovechado más.

Afortunadamente, no todo está perdido. Existen soluciones caseras que pueden ayudarte a devolverle a tus cosméticos su aspecto y sin necesidad de gastar ni un euro de más.

Una de las soluciones más recomendadas por quienes han enfrentado este problema es el uso de alcohol sanitario. Sin embargo, aunque esta técnica es efectiva para recomponer el maquillaje, hay quienes prefieren evitar el alcohol por considerarlo demasiado agresivo para la piel, especialmente en áreas sensibles como el rostro. Por suerte, los expertos en maquillaje han encontrado una alternativa igual de eficaz pero mucho más suave para la piel: el agua micelar.

Para llevar a cabo este sencillo truco, lo primero que debes hacer es recoger todo el producto que se haya roto y colocar los fragmentos en un recipiente. Es ideal utilizar un mortero o algún utensilio que te permita triturar el maquillaje lo más finamente posible. El objetivo es reducirlo a un polvo uniforme, sin ningún tipo de grumo, para que luego sea más fácil trabajar con él.

Una vez tengas el polvo bien triturado, añade una pequeña cantidad de agua micelar. La clave está en no excederte, ya que solo necesitas lo justo para que el polvo comience a transformarse en una especie de pasta. Mezcla todo hasta que adquiera una textura cremosa. Cuando la mezcla esté lista, colócala nuevamente en el envase original, cubriendo toda la superficie. Para evitar que se formen burbujas de aire, puedes dar unos golpecitos al envase, lo que también ayudará a que la mezcla se asiente de manera uniforme.

El siguiente paso es alisar la parte superior del maquillaje. Para hacerlo, coloca un papel sobre la mezcla y presiona suavemente con el dorso de una cuchara, con la palma de tu mano o con cualquier objeto plano que te permita dejar la superficie completamente lisa. Finalmente, deja que el producto se seque al aire libre, y en unas horas estará listo para ser utilizado de nuevo como si nada hubiera pasado.

El truco del agua micelar no es la única forma de revivir tus cosméticos rotos. Existe otra alternativa igualmente fácil y práctica, sobre todo si te queda muy poco producto y quieres aprovechar hasta la última gota. En lugar de usar alcohol o agua micelar, esta opción se basa en mezclar el maquillaje roto con crema hidratante.

El procedimiento es muy similar. Coloca los restos de maquillaje en un recipiente y añádeles una pequeña cantidad de crema hidratante. Mézclalo todo muy bien hasta que obtengas una crema uniforme y del color que tenía originalmente tu maquillaje en polvo, o incluso del tono que prefieras si deseas ajustarlo un poco. El resultado será una versión en crema de tu producto, que no solo es más fácil de aplicar, sino que también puede ser más beneficioso para tu piel al hidratarla al mismo tiempo.

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