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LA VERDAD
Lunes, 26 de abril 2021, 11:46
Los radares de la Dirección General de Tráfico (DGT) se colocan para evitar accidentes y reducir así las víctimas mortales que se producen en las carreteras, muchas de ellas por exceso de velocidad. Sin embargo, muchos conductores que no respetan los límites de cada vía habían encontrado la forma de evitar una multa de un radar de tráfico con un truco que consiste en pisar el freno de manera brusca y rebajar así la velocidad solamente en el punto donde está el radar de la DGT.
Conscientes de esta situación, desde Tráfico han decidido intentar poner fin a estas prácticas implantando lo que se conoce como 'radares en cascada', que no son más que dos dispositivos separados por solo unos metros que captan el momento en el que el conductor, tras haber frenado en el primer radar, vuelve a acelerar para superar el límite de velocidad de la vía.
De esta manera, junto con los radares de tramo, que obligan a mantener una velocidad constante durante varios kilómetros, la Dirección General de Tráfico está consiguiendo 'cazar' a los conductores infractores, que pasadas unas semanas se llevan la sorpresa en forma de carta con una multa de la DGT. La sanción por esta infracción, dependiendo de en cuánto se haya sobrepasado el límite de velocidad al pasar por el radar, puede llegar hasta los 200 euros.
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