La DGT te puede multar con hasta 500 euros por no pasar la ITV aunque tengas el coche aparcado

Todos los vehículos tienen que pasar la ITV, un tipo de mantenimiento legal que consiste en la supervisión periódica por parte de un ente verificado. La inspeción es necesaria para evaluar si el vehículo cumple en todo momento las normas de seguridad vial y los niveles de emisiones contaminantes establecidos por la normativa actual. En caso de tener un resultado desfavorable al pasar la ITV, tendrás que solucionar los problemas. Si no lo haces, te expones a una multa por suponer un peligro para la circulación.

El importe oscila según la gravedad del resultado de la inspección. Tener la ITV desfavorable o caducada supone una multa de 200 euros, que puede ascender a 500 si el estado es negativo. También conlleva una sanción similar no haber acudido a pasar la ITV en tiempo y forma.

Esta sanción te puede llegar mientras el vehículo se encuentra en movimiento y es interceptado en carretera, pero también aunque esté aparcado. La inmovilización, incluso si es por tiempo prolongado, no es motivo para eludir una multa por no tener en vigor la ITV. El manual de la DGT explica que la medida se aplica a cualquier vehículo que esté matriculado o puesto en circulación.

Como es lógico, solo se multarán los vehículos que estén estacionados en la vía pública, mientras que no recibirán sanción los que permanezcan en garajes privados. Suelen correr a cargo de policías locales durante controles ordinarios, aunque la multa viene en última instancia de la Jefatura Provincial de Tráfico, que se encarga de notificarlas y recaudar los pagos.

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