La lección de vida de uno de los empresarios más ricos de España a sus hijos: «Me niego a pagárselo aunque pueda»

Tener múltiples empresas que facturan millones de euros, tener inversiones y la cuenta llena y estar en la lista de personas más ricas de España no es motivo para no enseñar a los hijos el valor del esfuerzo y el trabajo. Al menos así lo piensa el empresario José Elías Navarro, protagonista de la famosa Lista Forbes y con participación en compañías de energías renovables, sanitarias o incluso de telecomunicaciones. Aunque tenga la posibilidad de ofrecer todos los caprichos y regalos que sus vástagos puedan soñar, ha decidido intentar que aprendan lo que cuesta vivir fuera de una familia acomodada.

Y es que este famoso empresario ha decidido compartir con sus seguidores que no va a cumplir con el sueño de su hijo: correr en karts. Los coches son uno de los gustos que más chicos comparten en la infancia, y se trata de una afición nada barata. José Elías indica que dos carreras de karts le habrían costado 700 euros al mes. Una cifra elevada para cualquier trabajador, pero no para él, cuya fortuna se estima en 950 millones de euros. Sería como una clase extraescolar de inglés para los simples mortales.

Sin embargo, José Elías se negó en rotundo a cumplir con esta petición de su hijo. Y el motivo es algo que debería hacer reflexionar a todos los padres: no porque se tenga la posibilidad de hacerlo se debe hacer. Esos 700 euros al mes «es la mitad de un sueldo de alguien que trabaja todo el mes. Y me niego a pagárselo aunque pueda», sentencia el empresario. La razón de esta decisión es que sus hijos deben esforzarse y entender que la vida no es «pedir y recibir».

Una dura lección para sus hijos, y que sin duda le habrá costado algún que otro enfado con ellos. Pero el empresario lo tiene claro: «Si les doy todo sin esfuerzo, les estaré haciendo un flaco favor. No quiero criar a alguien que nunca entienda lo que cuesta ganarse las cosas».

José Elías Navarro considera que educar en una familia acomodada es «difícil». Pero les ofrece la posibilidad de que salgan adelante por ellos mismos trabajando en sus empresas y así «curran para costearse lo que ellos quieran».

Por último reflexiona sobre su método de crianza con sus hijos. «Sé que a veces puedo hacerlo mejor, seguiré intentando que mis hijos aprendan que la vida no es abrir la boca y recibir lo que quieren».

Esta controvertida medida no ha sido del gusto de todos sus seguidores: algunos consideran que debería haber hecho una 'inversión' por si alguno de sus vástagos tiene el don de dedicarse a las carreras, pero la gran mayoría reconoce la dificultad de esta decisión: «Totalmente de acuerdo. Si criamos niños y niñas que se ganen las cosas sin esfuerzo, nos cargamos a la sociedad», le responde un usuario.