¿A qué huele un Rolls Royce de medio millón de euros?

Rolls-Royce ha creado por primera vez en su historia una fragancia exclusiva para perfumar el interior de su flota de Phantom, el buque insignia de una marca que vendió en 2024 en todo el mundo 5.712 automóviles; sólo tres de ellos a clientes españoles. De momento, el nuevo aroma del Phantom, al que han llamado Rolls-Royce Scent (Aroma Rolls-Royce), se circunscribe a este lujoso modelo, cuyo precio de venta al público, sin extras, ronda el medio millón de euros.

Los primeros clientes de la lujosa berlina no podrán disfrutar de la experiencia «multisensorial» que prometen con Rolls-Royce Scent hasta la segunda mitad de 2025, ya que, según han confirmado a este periódico fuentes de la firma británica, entre la solicitud de compra y la entrega efectiva del vehículo suelen transcurrir seis meses, por lo que las primeras unidades con la incorporación de serie de la fragancia no llegarán a sus adinerados compradores hasta junio como muy pronto.

Fuentes de Rolls Royce indican que desconocen los pedidos realizados desde España porque su único concesionario cerró en 2012. «Pero es posible que nuestros potenciales compradores españoles hayan hecho su encargo a través de distribuidores de otros países», aclaran.

La marca del Espíritu del Éxtasis, la legendaria figura que adorna el capó de los Rolls, ha encargado a los perfumistas de la Casa una «fragancia envolvente», que libera sutilmente esencias para una experiencia «elegante y duradera» al volante y que, según apuntan, viene a complementar las notas aromáticas que ya desprende la artesanía del interior de los Rolls, donde encontramos materiales como el cuero, la lana y la madera.

Es la primera vez que Rolls-Royce aromatiza su flota. De momento solo estará disponible en el Phantom, una de las berlinas más lujosas, robustas y grandes del mundo (unos 6 metros de largo), que justo en 2025 cumple su centenario.

La nueva fragancia combina notas de madera de cedro, palo de rosa de las Indias Orientales, amyris y flor de iris, esta última muy apreciada en la alta perfumería. Según detallan, la madera de cedro aporta una complejidad «calmante y delicadamente especiada», el palo de rosa añade una nota «seca y ligeramente dulce», mientras que el iris introduce «una calidad floral pero terrosa», complementada por los matices amaderados y ahumados del amyris.

Rolls-Royce Scent lleva varios años en estudio y ha generado «un interés significativo por parte de nuestros clientes en todo el mundo», avanzan desde la empresa.

La idea es que con Rolls-Royce Scent el conductor viva al volante «una experiencia multisensorial». En el exclusivo 'olor a Rolls' ha trabajado todo un departamento de bioquímicos y perfumistas, que se han asegurado de que la fragancia introduzca «sutilmente» en el habitáculo nuevos elementos olfativos «reconfortantes y relajantes».

Integrado de serie en los Phantom y, totalmente invisible para sus ocupantes, el difusor está diseñado para liberar la fragancia en «dosis delicadas y adecuadas». Dura un año y se puede recargar en los concesionarios Rolls.

Para garantizar un aroma constante, los expertos sometieron al sistema a más de 30 pruebas con variedad de temperatura y humedad, así como a situaciones con el vehículo parado y en movimiento, a distintas velocidades. «Se dedicó mucho tiempo a perfeccionar la dosis precisa antes de que los expertos estuvieran satisfechos con la fragancia», detallan desde Rolls, que confían en que esta nueva propuesta olfativa siga expandiendo la experiencia Rolls-Royce «a una nueva dimensión sensorial». El resto de los mortales nos deberemos conformar con colgar del retrovisor un ambientador de dos euros con olor a pino o bajar la ventanilla al cruzar un campo de jaras y sucumbir al perfume que nos regala esa planta mágica y aromáticamente deliciosa.

• Temas
• Automóviles