Consejos para no desperdiciar comida y ahorrar dinero en tu compra

La subida de precios en los últimos meses ha provocado que tengamos que fijarnos más en lo que valen los productos. A la preocupación de encontrar las gasolineras más baratas y pagar facturas de la luz, ahora se suma llenar la cesta de la compra. La mayoría de los alimentos cuestan más caros que hace un año, según el último estudio de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU). Una realidad que ha hecho que el ahorro se convierta en un asunto aún más importante en los hogares. Aunque existen diversos trucos para ahorrar, una de las claves para gastar menos es no desperdiciar la comida.

El Consejo Europeo de Información sobre la Alimentación (European Food Information Council) da una serie de consejos para no tirar comida. Esta organización sin ánimo de lucro señala algunos errores que suelen cometer los consumidores cuando hacen la compra y provoca que tiren muchos alimentos y pierdan dinero.

A través de su cuenta de Twitter han compartido las claves para no reducir el desperdicio de comida.

- Saber qué tienes en casa. Inspecciona tu despensa, frigorífico y armarios para no comprar productos repetidos, que si no se consumen pronto se echan a perder.

- Hacer una lista de la compra y no comprar artículos que no hayas apuntado.

- No compres más de lo que necesites. No caer en las ofertas 3x1 si sabes que no te hace falta tanta cantidad. Apuntan que estadísticamente se compra 3 bolsas de comida y 1 se tira.

- Congelar los productos que se vayan a caducar ante de ser utilizados

- Tener en cuenta en tu planificación los días que vas a comer fuera.

- A la hora de hacer la comida, cocina las proporciones adecuadas a lo que vayas a comer. No te olvides de las sobras para reutilizarlas cuanto antes en otras recetas.

Cuando te encuentras un alimento con moho, lo normal es que su aspecto te haga tirarlo de inmediato. Y aunque en algunos productos es correcto que lo hagas para no poner en riesgo tu salud, en otros no es peligroso si se elimina la parte del moho y la zona que la rodea. Lo mismo ocurre con la comida, que si no es del día, decides tirar. Estos son los alimentos que puedes seguir consumiendo:

- Frutas y verduras con moho que tienen una piel más gruesa, como manzanas, peras, nísperos, albaricoques, melocotones o plátanos. Corta 2,5 cm de alrededor de la zona de moho y ya te las podrás comer sin problema. Haz lo mismo con los embutidos y quesos curados con moho.

- Comida que ya ha vencido la fecha de caducidad, siempre y cuando el envase esté intacto y el producto tenga buen aspecto y huela bien.

- El pan duro lo puede utilizar en tus tostadas o para hacer pan rallado.