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Sábado, 14 de diciembre 2024, 00:01
La progresiva bajada de temperaturas anuncia la llegada del invierno y, con él, hacen su aparición las tradicionales celebraciones navideñas. A su vez, los excesos típicos, la menor ventilación de los hogares y el frío llevan consigo un aumento significativo en ciertas urgencias hospitalarias.
Según el doctor Fulgencio Molina, coordinador del Servicio de Urgencias del Hospital Quirónsalud Murcia, esta época del año está marcada por un incremento en las enfermedades respiratorias, exacerbaciones de dolencias crónicas y accidentes domésticos o de tráfico.
Además, los excesos alimentarios y emocionales propios de las fiestas navideñas añaden un riesgo extra, sobre todo para los pacientes con problemas cardiovasculares o trastornos gastrointestinales.
Las urgencias más comunes en esta estación incluyen infecciones respiratorias, como resfriados, gripes y bronquitis, especialmente en personas mayores y niños pequeños. De igual modo, aumentan las exacerbaciones de enfermedades crónicas como el asma y la EPOC y las complicaciones cardiovasculares, como anginas de pecho e infartos, debido al esfuerzo que el frío impone al organismo.
Por otro lado, el doctor nos habla de otras de las asistencias más recurrentes. Son aquellas lesiones relacionadas con caídas por superficies resbaladizas debido a las lluvias y las heladas.
Los pacientes más vulnerables son los ancianos, los niños y las personas con enfermedades crónicas (bien sean cardiovasculares, respiratorias o diabetes). También quienes tienen un sistema inmunológico débil.
Pero prevenir las complicaciones durante los meses más fríos es posible. Para ello resulta esencial abrigarse bien y evitar los cambios bruscos de temperatura. Otras acciones que también están en la mano de cada uno es mantener una buena hidratación y vacunarse contra la gripe y otras infecciones habituales en esta época del año.
Aun así, el doctor nos recomienda buscar atención médica ante síntomas como:
- Dificultad respiratoria.
- Dolor torácico.
- Dificultad para mover alguna extremidad.
- Desviación de la comisura de la boca.
- Alteración del habla o del nivel de conciencia.
¿Y qué pasa si tienes otro tipo de síntomas? En caso de que te encuentres con fiebre o dolor abdominal, lo ideal sería consultar en otras áreas asistenciales, pero no es necesario acudir a urgencias.
Las bajas temperaturas del invierno y el frío debilitan las defensas del organismo propiciando la entrada de virus y bacterias. Asimismo, solemos estar en espacios cerrados durante más tiempo, algo que también favorece la transmisión de enfermedades.
En este sentido, entre las urgencias más comunes de esta época del año, el doctor Molina destaca las siguientes:
- Infecciones respiratorias de vías altas. Resfriados y gripes, que son generalmente leves, pero pueden complicarse en personas vulnerables. Se transmiten con facilidad en ambientes cerrados y los síntomas suelen agravarse por el frío.
- Exacerbaciones de EPOC o asma. Los cambios bruscos de temperatura, la exposición a alérgenos y el aire frío pueden agravar estas condiciones, provocando dificultad para respirar y necesidad de atención médica.
- Neumonía. Las infecciones bacterianas, como las causadas por Streptococcus pneumoniae, son más frecuentes en esta época y pueden ser graves, especialmente en ancianos y pacientes con enfermedades crónicas.
- Crisis respiratorias por alergias o irritantes. Las decoraciones navideñas, el polvo acumulado en los adornos o el humo de las chimeneas pueden actuar como desencadenantes en personas sensibles.
- Complicaciones cardiovasculares. Algunos eventos isquémicos como las anginas de pecho o los infartos pueden derivarse de los excesos alimenticios sumados al esfuerzo adicional que debe hacer el corazón en climas fríos.
- Lesiones por caídas. Las heladas o las lluvias provocan caídas accidentales debido al aumento de superficies resbaladizas.
Existen algunas medidas que todos tenemos a nuestro alcance para reducir el riesgo de contagio. Entre ellas, el doctor destaca acciones tan simples como ventilar con regularidad los espacios, llevar mascarillas o evitar el contacto con personas enfermas.
También indica que abrigarse al salir al exterior o respirar por la nariz resultan claves.
Pero como no siempre es posible evitar contagios, en ocasiones habremos de centrarnos en prevenir las complicaciones de estas infecciones. Para ello, el doctor Molina recomienda prestar atención a los siguientes consejos:
- Vacunación. Las vacunas contra la gripe y el neumococo son esenciales para grupos de riesgo, como ancianos, niños pequeños y personas con enfermedades crónicas.
- Evitar cambios bruscos de temperatura. Cubrir la boca y la nariz al salir al exterior puede ayudar a calentar el aire antes de inhalarlo.
- Mantener una buena higiene. Lavarse las manos con frecuencia y evitar tocarse la cara son medidas efectivas para prevenir contagios.
- Control ambiental. Usar humidificadores en casa y evitar ambientes muy secos ayudará a que no se irriten las vías respiratorias.
- Evitar el humo del tabaco. Fundamental tanto para fumadores como para quienes conviven con ellos, ya que debilita las defensas respiratorias.
Es habitual atender casos de indigestión, intoxicaciones alimentarias y pancreatitis aguda derivadas de comidas abundantes y ricas en grasas. También se presentan intoxicaciones etílicas por consumo excesivo de alcohol, las cuales pueden causar vómitos, deshidratación o incluso pérdida de conciencia. Además, en pacientes con enfermedades como diabetes o hipertensión, los excesos pueden desencadenar descompensaciones graves.
Por otro lado, el frío provoca una contracción de los vasos sanguíneos (vasoconstricción) para conservar el calor corporal. Como consecuencia, la presión arterial aumenta y obliga al corazón a trabajar más para bombear la sangre. Esto puede ser peligroso, especialmente en personas con hipertensión, enfermedad arterial coronaria o insuficiencia cardíaca.
El estrés y las emociones intensas en las reuniones familiares también pueden afectar la salud. Más de lo que podemos imaginar. Por eso, en estas fechas se han registrado más casos de emergencias cardiovasculares que en otras épocas del año. Los factores emocionales y el estrés de las reuniones familiares, combinados con el consumo excesivo de alcohol, sal y grasas, agravan el riesgo.
Los cuatro eventos a nivel cardiovascular más frecuentes en estas fechas suelen ser los siguientes:
- Infarto de miocardio. El esfuerzo adicional del corazón puede provocar la rotura de una placa de ateroma, lo que lleva a la formación de un coágulo que obstruye las arterias coronarias.
- Angina de pecho. La vasoconstricción y el aumento de la demanda cardíaca pueden reducir temporalmente el flujo de sangre al corazón, causando dolor torácico.
- Crisis hipertensivas. Durante esta época, la combinación de frío y excesos puede provocar un aumento peligroso de la presión arterial. A su vez, esto podría derivar en eventos graves como accidentes cerebrovasculares.
- Arritmias. Tanto el estrés como el consumo excesivo de alcohol (especialmente el «síndrome del corazón festivo») pueden desencadenar irregularidades en el ritmo cardíaco.
Después de analizar las urgencias cardiovasculares más frecuentes en esta época del año, es evidente que la prevención juega un papel clave para evitar sustos innecesarios. Así, adoptar hábitos saludables y mantener ciertos cuidados específicos puede marcar la diferencia entre disfrutar de las fiestas o terminar en una sala de urgencias.
El doctor Molina nos ha ofrecido algunos consejos prácticos para cuidar el corazón durante la Navidad:
- Evitar la exposición prolongada al frío. Abrigarse adecuadamente y limitar las actividades al aire libre en temperaturas muy bajas.
- Seguir la dieta recomendada. Mantener una dieta equilibrada, evitando alimentos ricos en sal, azúcar y grasas, especialmente si se padece hipertensión o hipercolesterolemia.
- Gestionar el estrés. Incorporar prácticas de relajación, como meditación o respiración profunda, durante la época navideña. También ayuda practicar ejercicio moderado.
- Control médico regular. Si se tienen antecedentes cardiovasculares, es vital realizar chequeos y seguir al pie de la letra las recomendaciones del cardiólogo, incluyendo la medicación. En ningún caso ha de abandonarse el tratamiento farmacológico motu proprio.
- Evitar el alcohol en exceso. Más allá de su efecto tóxico, el alcohol puede interactuar con medicamentos y provocar alteraciones del ritmo cardíaco.
Ante síntomas como dolor torácico, sudoración, dificultad para respirar o palpitaciones irregulares, es fundamental buscar atención médica de inmediato. «Los primeros minutos son cruciales para evitar complicaciones graves o irreversibles», asegura el doctor Molina.
Además, quienes padecen enfermedades crónicas, como diabetes o hipertensión, necesitan tomar otras precauciones para disfrutar de las fiestas sin comprometer su salud. Entre ellas, seguir el tratamiento médico, evitar excesos en comida o alcohol y mantenerse hidratados. Por tanto, deberán planificar sus comidas, controlar las porciones y el contenido de sal o azúcar.
También es importante que se realicen controles regulares, como la medición de la glucosa o la presión arterial. Asimismo, no deberían abandonar los hábitos de ejercicio, aunque sea moderado.
Más información en el servicio de Urgencias del Hospital Quirónsalud Murcia
Además de las urgencias relacionadas con problemas cardíacos, infecciones o intoxicaciones típicas de estas fechas, el invierno y las celebraciones navideñas también traen consigo otros riesgos importantes.
Los accidentes domésticos y los accidentes de tráfico son situaciones que, aunque a menudo se pasan por alto, pueden tener consecuencias graves si no se toman las precauciones necesarias.
En las épocas más frías del año, solemos utilizar calefactores y estufas en casa que nos protejan de las bajas temperaturas. Lo que no solemos tener presente es que pueden provocar quemaduras o incluso intoxicaciones por monóxido de carbono. Esto se da, sobre todo, si los calefactores están defectuosos o si el espacio no tiene una ventilación apropiada.
Por tanto, para prevenir este tipo de accidentes es importante:
- Revisar de forma periódica los equipos.
- Instalar detectores de monóxido de carbono.
- Evitar bloquear las salidas de ventilación.
- No dejar encendida una estufa de llama durante la noche, mientras duermes, ni usarla en una habitación cerrada.
- Alejar las fuentes de calor del paso y de materiales inflamables como textiles. También conviene que no estén al alcance de los más pequeños de la casa.
En cuanto a los accidentes de tráfico, en gran parte son debidos a la combinación del aumento de desplazamientos, la falta de descanso y el consumo de alcohol.
El doctor Molina nos indica que «lamentablemente, durante las fiestas, las celebraciones y el consumo de alcohol contribuyen a un aumento de accidentes de tráfico, especialmente en horarios nocturnos. Esto es así debido a que el alcohol reduce la capacidad de reacción y aumenta el riesgo de accidentes graves».
Ante estas circunstancias, el Hospital Quirónsalud Murcia dispone de una Unidad de Tráficos que está diseñada para atender a personas que han sufrido accidentes de tráfico. Este servicio médico cuenta con un equipo multidisciplinar en el que se incluyen especialistas en traumatología, neurología, rehabilitación y fisioterapia.
La característica más importante de este servicio es la atención gratuita y continua 24 horas al día los 365 días del año. Esto quiere decir que todo el mundo puede solicitar la atención de esta unidad de tráfico. No es necesario tener un seguro médico contratado para solicitar sus servicios.
¿Cómo pueden atenderte? El doctor Molina nos explica que «para ser atendido en esta unidad, únicamente se debe acudir al Servicio de Urgencias de Quirónsalud Murcia. Desde allí se realizan todos los trámites administrativos y las gestiones relacionadas con la compañía aseguradora del vehículo».
Las Unidades de Tráfico de Quirónsalud disponen de todos los recursos y de rápido acceso a servicios de apoyo (resonancia magnética, TAC, ecografía, laboratorio y quirófano) que, junto al resto de personal del hospital, garantizan la seguridad de los pacientes.
El invierno y las celebraciones navideñas traen consigo riesgos específicos para la salud, que pueden prevenirse con simples medidas de precaución y hábitos saludables.
Desde el Hospital Quirónsalud Murcia, el Dr. Fulgencio Molina recuerda la importancia de prestar atención a los síntomas tempranos y buscar ayuda médica ante cualquier signo de complicación. Conocer los riesgos y actuar a tiempo no solo puede evitar urgencias graves, sino también garantizar que disfrutes de una temporada invernal saludable y sin sobresaltos.
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