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1.
Las cuentas estaban claras para el Real Murcia antes de empezar el choque. Perdió el Recreativo y ganó la AD Ceuta, nuevo quinto clasificado. La ... diferencia entre el 'playoff' y el Murcia era de ocho puntos y en caso de victoria pasaría a cinco con un Murcia-Ceuta aún por jugarse. Faltaba por ver cómo respondería. Sin embargo, el equipo no mostró la ambición y la autoridad previstas. Se plantó en un bloque medio y buscó más atacar al espacio. No empezó mal el partido, con rupturas de Pedro León y Dani Vega, los extremos. Pero se llenó de imprecisiones y dio un bajón muy rápido. Entre tantas pérdidas ni elaboró ni contragolpeó.
2.
Dentro de esa mala primera parte, hubo algunas cosas concretas a valorar. Una fue el regreso de Pedro León a un once como extremo derecho. A pesar de un par de desmarques en ese inicio, no pareció cómodo dentro del contexto general. Por su parte, Amin, que esta vez fue el '9' del equipo en lugar de Carrillo, intentó buscarse la vida con sus carreras al espacio generando una ocasión al principio y alguna otra buena opción, pero el juego del equipo no le ayudó. Esa faceta más creativa no mejoró tampoco con Sabit. Al lado de Larrea, fue segundo pivote en defensa e interior en ataque. Sin embargo, el mediocentro defensivo no aportó soluciones ofensivas en ese rol más propio de un '8'.
3.
El Recreativo Granada se presentaba en el Enrique Roca como un rival con talento pero frágil. Colista del Grupo 2 de Primera Federación, también era el peor visitante de la categoría al ser el único que aún no había ganado a domicilio. Y al primer minuto ya mostró esa debilidad concediendo la ocasión ya citada de Amin. Parecía un equipo vulnerable, pero poco a poco fue sintiéndose más cómodo sobre el césped y demostró que también tiene calidad con Pablo Sáenz, Mario o Rodelas. Se fue creciendo con la posesión y siendo combinativo. Así generó algunas llegadas con peligro para recordar que venía de vencer y que en Algeciras había sido capaz de adelantarse en el marcador. Un filial ya con poco que perder y que demostró que su mayor problema son las áreas. No acertó arriba y concedió a última hora el penalti de la derrota.
4.
El Murcia necesitaba mejorar, pero se encontró tras el descanso con todo lo contrario. La cosa se puso incluso peor. Empezó perdiendo a Isi Gómez, el mayor faro en la medular, sustituido por Pina para empezar el segundo tiempo. Y el equipo tampoco pudo ser más agresivo para generar desde el robo. Además, se quedó con 10 por la expulsión de Larrea por doble amarilla. El lateral Enol Coto entró por el extremo Pedro León. La sensación era de que todo podía ir a peor con los jugadores también ya muy enredados con las decisiones arbitrales. Otra semana más, los de Alfaro tuvieron que sufrir en dosis muy altas.
5.
En un momento ya muy delicado para el equipo, la entrada de José Ángel Carrillo levantó los ánimos de la grada. Entre el delantero y una jugada entre Dani Vega y Enol Coto, el Murcia intentó creer en la victoria. También en ese momento recibió un impulso de los aficionados, antes críticos y ahora comprensivos con la situación. El Murcia no terminó de mejorar, pero encontró la energía de Marc Baró y Dani Vega para ir arriba. Quedaba el corazón y Carrillo se trabajó la victoria bajando un centro y provocando un penalti que él mismo transformó. El Murcia sacó otro partido por la mínima.
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El Real Murcia logró una agónica victoria ante el Recreativo Granada, el colista, con un gol en los últimos minutos. «Hemos sido capaces de conseguir los tres puntos con mucho sufrimiento. Era uno de esos partidos trampa. Les queda muy poco para descender, pero no te lo ponen nada sencillo. Los primeros minutos sí han sido buenos. Todo se va hacia donde no quieres. La igualdad es tremenda. Hemos podido estar mucho mejor. Hemos tenido fe hasta el final», valoró Pablo Alfaro.
El técnico también explicó sobre el encuentro y el rival que «tienen mucho criterio con el balón y hemos dado muy poca continuidad a nuestras jugadas. En las áreas son más débiles, por eso hemos podido decantar el partido. Si perdemos el equilibrio, tenemos problemas».
La afición también jugó. Pitó en la primera parte y apoyó en los peores momentos. «Es totalmente comprensible. La gente no tiene que saber cómo juega el último. Si no conviertes las ocasiones, se te puede volver en contra. Tenemos que estar muy agradecidos, cuando nos han visto sufrir con uno menos nos han empujado, han estado con nosotros», afirmó. Y señaló sobre el 'play-off': «Quedan ocho semanas intensas. Nos tenemos que acercar a nuestra mejor versión para seguir soñando».
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