Andrés Carrasco cumple su sueño y firma por el Real Murcia

Las oportunidades en la vida y en el fútbol llegan muchas veces cuando parece difícil creer en ellas. Algo así debe pensar el delantero murciano Andrés Carrasco que, a sus 33 años, ha firmado este viernes por el Real Murcia y es el primer fichaje del nuevo proyecto grana con Manolo Molina en la dirección deportiva y Mario Simón como técnico en el banquillo del Enrique Roca.

El ariete, un clásico del fútbol regional y eterno goleador en el Grupo XIII de Tercera, siempre ha demostrado tener olfato de cara a portería, pero no ha acabado de dar el salto a un club importante. En total, acumula alrededor de 150 partidos en la categoría de bronce y 33 goles. Ahora, cuando parecía que ese tren había pasado para él, de hecho Carrasco oposita para policía, le llega el momento que ha esperado durante toda su carrera deportiva.

«A todos los jugadores murcianos les gustaría jugar en el Real Murcia. Yo estuve a punto de debutar en el primer equipo del Murcia con José González en la temporada 2009/10 y pasé aquella semana en una nube, pero no pudo ser. Me duele, tengo esa espina clavada. Ojalá algún día me llamaran. Quién sabe», dijo Carrasco el pasado mes de noviembre en una entrevista concedida a LA VERDAD antes de medirse al Real Murcia con la camiseta del Lorca Deportiva en el Artés Carrasco.

El delantero murciano llegó al club grana en categoría infantil y se marchó con 21 años tras jugar dos temporadas con el Imperial en Segunda B. Dos cursos con José Miguel Campos y Manolo Requena en los que coincidió con futbolistas como Sergio Escudero, Kike García o Manu Trigueros que saben lo que es llegar al fútbol de élite. Entonces disputó 48 partidos e hizo dos goles con la elástica grana antes de pasar al filial del Valencia, en el que también jugó con compañeros como Paco Alcácer, Isco, Carles Gil o Roger Martí. Sin embargo, volvió a la Región para jugar en el Yeclano y el Caravaca en Segunda B sin demasiado éxito. La Hoya Lorca, de Manolo Molina, el filial del UCAM o el Águilas fueron algunos de sus siguientes destinos en Tercera.

Carrasco firmó por el Lorca Deportiva en 2015 en Tercera y llevó al equipo de la Ciudad del Sol a convertirse en campeón del Grupo XIII, aunque no pudo conseguir el ascenso. Un año después se repitió la historia en la liga regular, pero en esta ocasión sí que logró subir a la categoría de bronce en un año absolutamente espectacular para el murciano. En total, marcó 43 goles y fue el máximo goleador de España en las principales categorías del fútbol nacional.

Ya en Segunda B, las cosas no salieron bien para el equipo blanquiazul, aunque con Mario Simón como entrenador el equipo mejoró, y el Lorca Deportiva descendió con Carrasco haciendo 8 tantos. Sus buenos registros le sirvieron para hacer las maletas y marcharse a un equipo de perfil bajo en Segunda B como el Villanovense. En tierras extremeñas solo hizo cuatro goles y, además, allí se le escapó una oportunidad de jugar en el Real Murcia. En enero de 2019, Pedro Cordero, en ese momento director deportivo grana, lo llamó para volver a la capital del Segura, pero el Villanovense no le dejó marchar a mitad de temporada.

El delantero, que sabe que el Artés Carrasco es como su segunda casa, volvió en verano al Lorca Deportiva en Tercera y consiguió de nuevo el ascenso con los blanquiazules. Carrasco se perdió los tres primeros partidos por sanción, pero en su segundo encuentro de esta temporada 2020/21 se reencontró con el gol. En total, disputó 22 partidos, 20 de ellos como titular, y marcó 11 goles. Una cifra destacada en un equipo como el Lorca Deportiva que ha tenido un año difícil a nivel deportivo. Por ello, Molina y Simón se han fijado en él para que sea el primer fichaje grana y una pieza importante en el Real Murcia de la próxima temporada que tiene la obligación de subir a la Primera RFEF.