Gastronomía con olor a sal

Situado frente al mar, Restaurante Miramar ha sabido aunar en su cocina las recetas de siempre con las mejores materias primas. Pescados y mariscos frescos de la zona del Mediterráneo se incluyen dentro de una carta que destaca por mezclar de forma perfecta la calidad y el sabor. Sus platos estrella, el Gallo Pedro frito y el arroz con bogavante, hacen las delicias de aquellos que llegan a este local deseando disfrutar de lo mejor de la costa murciana.

Años de buen hacer han permitido al Restaurante Bonobo convertirse en parada obligatoria para aquellos que quieren degustar los mejores sabores del mar. Este local, que se sitúa a pie de playa, cuenta con una cocina tradicional en la que no falta nunca el pescado y el marisco fresco español, especialmente de la costa murciana. Así, la parrilla de marisco o el arroz de carabinero son santo y seña de un establecimiento que no deja indiferente a ninguno de sus visitantes.

Viajar a través de los sabores es una opción muy interesante que se hace posible al visitar el Restaurante Yemanjá. Este local, que se sitúa en Cabo de Palos y que fusiona la comida española y sudamericana, cuenta con una extensísima carta en la que se entremezclan platos de diferentes culturas, lo que permite al comensal disfrutar de una experiencia global que se inicia en el paladar pero que engloba a todos los sentidos. Su entorno, que reinvindica esa mezcla de culturas, se plasma en un espacio especialmente colorido y alegre en el que disfrutar de los mejores bocados, bien sea en su interior o en la terraza de la que dispone. A nivel gastronómico, las elaboraciones de este restaurante incluyen verdaderas empanadas argentinas, hechas al estilo tradicional, una amplia selección de bocadillos, ensaladas con salmón, pulpo, papas con mojo picón, tabla de quesos, pastrami con salsa tártara y papa rellena de cerdo mechado, platos estrella que se realizan siguiendo todas las medidas de seguridad que estos tiempos requieren y que convertirán la experiencia gastronómica que viven los comensales en un éxito de largo alcance.

El Restaurante La Ola ha traído a la Región un concepto de cocina desarrollada a baja temperatura. En su carta se pueden encontrar desde originales ensaladas y pinchos hasta un elaborado plato de carrillera a baja temperatura cocinado durante 36 horas, lo que ayuda a dotarlo de mayor jugosidad y sabor. También sobresale especialmente el tartar de atún rojo y el costillar a baja temperatura, dos bocados que transforman la experiencia en todo un viaje gastronómico.

Recetas tradicionales y sabores de siempre se entremezclan en la carta del Restaurante Calaflores. Este establecimiento ha sabido combinar como nadie los mejores pescados y carnes de la tierra en una oferta a la que no puede resistirse ningún paladar. Así, en un entorno que evoca Murcia en cada esquina, los comensales podrán degustar todo tipo de arroces, entre los que destaca el caldero, y un asado de cordero que lleva a la mesa lo mejor de ayer y de hoy.