La luz más brillante de Viva Suecia

El miedo al cambio puede llegar a paralizarte por completo. De repente, el siguiente paso, el cual muestra una serie de elementos alejados de una zona de confort perfeccionada a lo largo de los años, se convierte en abismo, incertidumbre cegadora, intuición de hielo en los huesos y paréntesis con exceso de puntos suspensivos. Sin embargo, hay personas valientes capaces de ir más allá del terreno conocido, escuchar el rugido del motor en marcha y lanzarse con entusiasmo y convicción hacia nuevos horizontes.

Y los cuatro miembros de Viva Suecia son un ejemplo de ello, como ha quedado más que demostrado en el estupendo 'El amor de la clase que sea', un último trabajo que destila claridad, optimismo, afecto e ilusión. Alejados de las sonoridades más oscuras y atmosféricas de sus anteriores (y magníficos) trabajos, Rafa Val, Alberto Cantúa, Jess Fabric y Fernando Campillo, contando con la ayuda clave de Santos & Fluren en la producción y la colaboración de artistas tan dispares como Dani Fernández, Leiva y Luz Casal, coprotagonista del mejor tema del disco ('La parte difícil'), apuestan por unas melodías más directas y una presencia mayor de la voz en la que es, con diferencia, la obra más luminosa de su trayectoria.

Un abrazo en forma de disco que, como ocurre con la práctica totalidad de su repertorio, crece sobre el escenario, terreno donde la banda se ha consolidado con firmeza como una de las más potentes de nuestro país. Este sábado, además, juegan en casa, lo cual asegura una emoción todavía mayor. Sí, apunta a uno de los conciertos del año en la Región de Murcia.

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