Un antihéroe de comic en 'Morbius'

Siento deciros que los estrenos de hoy no son tan aburridos como la gala de los Oscar, pero se le acercan. Así que entenderé que me dejéis y sigáis leyendo sobre Ucrania, sobre el congreso del PP, o sobre la agencia de la T.I.A. que habían montado en 'Sálvame'.

Si aun así persistís (además de preocuparme por vuestra pulsión suicida) os informaré de que el primero de los estrenos de este viernes lo protagoniza Jared Leto, que debe haber hecho un pacto con el Diablo, porque tiene mi edad y parezco su tío abuelo del pueblo. Pero reconozco que es el actor perfecto para protagonizar 'Morbius', con su pinta de estar permanentemente de viaje lisérgico, hasta el punto que es el único atractivo de un film fallido.

En esta nueva adaptación de un comic, en esta ocasión dentro del universo extendido de Spiderman, nos cuentan las desventuras de un hombre que sufre una enfermedad en la sangre, de la que consigue curarse aunque eso lo transforma en una especie de vampiro 5.0. La cosa deja mucho que desear, no estando a la altura de otras adaptaciones no sólo más brillantes sino mejor hechas, que es lo mínimo que se le puede pedir a estas diversiones sin consecuencias, a estos affaire con el cine comercial.

El Festival de Málaga terminó hace unos días, y el mejor certamen de cine español ha sido la antesala de algunas de las novedades que nos llegan hoy. El primero de ellos es 'Canallas', una película a medio camino entre una broma y una españolada modernizada. Es el retrato de tres pícaros que se aprovechan de las debilidades ajenas y sacan partido a la poca inteligencia con que Dios les dotó. Les sobra calle pero les falta sentido común (y ganas de trabajar).

Daniel Guzmán, el director, realizó un notable primer trabajo llamado 'A cambio de nada' (2015), descubriendo a actores que luego han sido famosos como Miguel Herrán. Aunque en esta aventura se ha buscado un escudero potente como Luis Tosar, podría haber realizado una vuelta más brillante a la realización tras su one-hit wonder. El relato certero de unos jóvenes de barrio de su opera prima, se transforma aquí en el relato sin gracia de unos estafadores de medio pelo y sin la inteligencia de 'Granujas de medio pelo' (2000) ni el saber estar de Tony Leblanc en 'Los tramposos' (1959). Los críticos han sido tibios, como el padre que no se atreve a reñir al hijo de sobresaliente que trae un cinco raspado a casa.

Leonardo Sbaraglia, otro actor para el que los años no pasan, y Eva Llorach, protagonizan el intensito drama argentino (qué redundancia) 'Ámame'. Una demostración de fuerza interpretativa de Sbaraglia, premiado en Málaga, que esta soberbio como el padre desesperado por conservar el amor de su hija y sus amantes, pero sin hacer nada real para preservar ni lo uno ni lo otro. Nos ofrece unos primeros planos que no son sólo los gestos de un actor sino una radiografía de su alma.

La siguiente de la que os hablo también tiene su máxima fuerza en las grandes interpretaciones: 'Mass'. La historia es dura. Dos matrimonios se encuentran en un frío salón de una iglesia para hablar de la muerte de sus hijos, uno a manos del otro (plan tan divertido como ir a echar gasolina al coche). Esa temática, la de cómo procesar cuando tu hijo se convierte en un asesino de instituto, ya la vimos en 'Beautiful boy' (2010), pero aquí todo es más descarnado y duro, más frío, y con menos concesiones. Yo creo que es debido a una puesta en escena puramente teatral, similar a la de 'Un dios salvaje' (2011).

El equivalente del tortazo de Will Smith al cine es 'Sonic: la película 2', que hoy se estrena (¿por qué?) Este insulto al séptimo arte era absolutamente prescindible. Relato de las nuevas correrías de este personaje de consola. Y como guinda a semejante atentado a la inteligencia encima ¿actúa? JIm Carrey. Ir a verla es tan apetecible y temerario como tomar un té en el Kremlin.

Lo más destacable de la semana es que 'CODA', flamante premiada con el Oscar a la Mejor Película, pasará en breve a ese glorioso listado de películas que, conforme pasan los años, nadie entiende como ganó ese galardón. En esa enumeración no pueden faltar 'Shakespeare enamorado' (1998), 'Crash' (2005), 'Una mente maravillosa' (2001), 'Paseando a Miss Daisy' (1989) o 'Kramer contra Kramer' (1979).

Aunque al mundo ya no lo pueda proteger John McClane, que tengáis una semana de cine.

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