'Adult material', de profesión actriz porno

¿Cómo sería la vida de una ama de casa, ese concepto antediluviano, que se dedica al porno para pagar las facturas? O más bien, ¿cómo es la vida familiar de una actriz de cine X? Las tribulaciones hogareñas, los problemas, preocupaciones y anhelos de una mujer que se gana la vida como trabajadora sexual frente a las cámaras vertebra una de las series más curiosas del momento, 'Adult material', disponible en Filmin y en HBO desde hace unos días. Cuatro capítulos de 45 minutos cada uno, una duración asequible en los tiempos que corren, donde nos abocan al estrés sin remedio con tanto estreno semanal en las mil y una plataformas que invaden el negocio del entretenimiento. Con música de baile y un estética que remite por momentos a los años 70, época dorada del celuloide para adultos, aunque la acción transcurre en la actualidad, comienza la descripción de las vicisitudes de una pornstar cansada de su trajín diario. Madre de tres hijos, con un marido entregado -y despistado- que le lleva las redes sociales, su deseo de abandonar el género, desmotivada por el cambio en los parámetros del negocio, abrumada por una crisis existencial de caballo, no será nada fácil. Hayley Squires, a la que hemos podido ver en películas como 'Yo, Daniel Blake', de Ken Loach, o la extravagante 'In Fabric', protagoniza este drama, no exento de humor, dirigido por Dawn Shadforth ('La materia oscura'). El resultado ha contado con el asesoramiento de estrellas del Nopor, como se etiqueta en la red los contenidos directos a la entrepierna para esquivar la censura en las grandes plataformas.

'Adult Material' retrata los entresijos de la industria del cine pornográfico, que ya no es cine. Señala cómo está cambiando el sector, hacia dónde va y cómo influye en la sociedad, incluyendo un tema áspero: la posible educación en el porno de nuestros jóvenes por obra y (des)gracia deinternet. Explora debates de actualidad, como el consentimiento o los límites de la sexualidad. En paralelo, retrata los problemas emocionales de una familia peculiar, estigmatizada por el trabajo inusual de la madre del clan, Jolene Dollar para sus fans. La irrupción en escena de una joven actriz inexperta de la edad de su hija, junto a algunos problemas de salud (como una clamidia ocular que le lleva a lucir un parche en un ojo, una imagen muy icónica en la historia del séptimo arte), empuja a la protagonista a replantearse su trabajo, una decisión que afecta a su entorno (sus hijos no lo pasan bien en el colegio). Se hace múltiples preguntas a sí misma, buscando qué motivaciones tuvo en su día para decantarse por una excéntrica trayectoria laboral que no se demoniza en la ficción, pisoteando clichés en la exposición, sin juicios morales radicales.

A la protagonista de 'Adult Material' le asolan las inseguridades y los problemas comunes. No deja de pertenecer en espíritu a la clase trabajadora, a pesar de su singular faceta. Si no ganase tanto dinero desnudándose frente a las cámaras no podría pagar la hipoteca de una casa adosada. Mientras, el paso del tiempo hace mella en su físico y encuentra dificultades en aceptar las nuevas normas del negocio. Lo interesante de la serie es que no representa el mundo del porno como algo sórdido, pero tampoco glamuroso. Hay una 'normalidad' en las descripción de lo que vemos que invita al espectador a hacerse preguntas sobre sus prejuicios. Una actriz de cine X no tiene porqué ser una pobre mujer adicta a las drogas o alguien superficial que busca fama y dinero fácil. Hay otros mundos que están en éste. Las cuatro entregas desarrollan temas como la clara influencia del capitalismo y el patriarcado en la industria del porno, el machismo imperante, las condiciones laborales de las actrices o la ansiedad que provoca tener que ser a todas horas una celebridad online. Una perspectiva interesante, para nada maniquea y facilona, de un asunto espinoso, sin caer en la caricatura. Abstenerse mentes cerradas.

'Adult Material' está disponible en HBO y Filmin.