El nuevo impuesto amenaza con subir la factura por la gestión de residuos en Orihuela

Equivocarse sin intención o deliberadamente a la hora de usar los contenedores de reciclaje le puede salir a partir de este año muy caro a las arcas municipales. El Ayuntamiento de Orihuela y el resto de consistorios asociados al Consorcio Vega Baja Sostenible han sido notificados de que se empezará a cobrar un nuevo impuesto que grabará esos residuos «impropios». Según cálculos del exedil de Residuos Urbanos, Dámaso Aparicio (PP), con un porcentaje de impropios cercano al 40%, la 'fiesta' podría incrementar en Orihuela el presupuesto de la Concejalía en unos 600.000 euros anuales, 50.000 mensuales. Un descuadre «muy importante», máxime cuando, recuerda, los presupuestos llevan prorrogados desde 2018.

La ley que habilita este tributo entró en vigor el pasado 1 de enero, pero no ha sido hasta abril cuando se ha informado de cómo se procederá a su pago. En este sentido, será la empresa Prezero la que hará una facturación mensual de las cuotas del impuesto sobre el depósito de residuos en vertederos, la incineración y la coincineración de residuos. El cálculo del importe de los rechazos a vertedero que correspondan a Orihuela se hará en base a las entradas que se registren en la planta de transferencia de Dolores.

Asimismo, Prezero dio el 13 de abril un plazo de 15 días para que el Ayuntamiento le facilite los datos necesarios para proceder al envío de la factura a través de la sede electrónica del Ayuntamiento. Asimismo, advirtió de que, en caso de que no se realice el pago de las facturas, se informará de este extremo al Consorcio, así como a la autoridad competente de la Comunidad Valenciana.

El concejal Dámaso Aparicio acusa falta de previsión por parte del actual edil del área, Guillermo Cánovas (PSOE). «Ha sido un año perdido en la gestión de residuos», asegura. «Seguimos sin presupuestos, sin afianzar la ampliación de la plantilla y el Plan de Residuos Local continúa en un cajón cuando yo lo dejé preparado antes de salir del gobierno», recrimina. En el mismo sentido, Aparicio urge a que Cánovas implante el contenedor marrón para residuos orgánicos, como obliga la ley en todos los municipios de España desde el pasado septiembre. Para el exedil de Residuos, estos podrían reducir en parte el porcentaje de impropios.

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