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Volver a la vida

La cruz nos da esperanzas de que volveremos algún día a ese rincón de la memoria donde fuimos felices

Domingo, 13 de abril 2025, 07:30

A cada acción su reacción. Es el sino de los tiempos, de los que nos vanagloriamos de haber enterrado a los dioses y caminar por ... el mundo despojados de creencias, tan laicos, tan atrevidos y seguros, modernamente solitarios. Las iglesias se vacían y se llenan las calles al paso de un Cristo, con el bamboleo de una Virgen que alcanza en el silencio de la noche su momento escogido. No encierra contradicción posible este hecho. La sociedad reclama el aire de las plazas y no el sermón, la devoción popular y libre, y no el dogma enclaustrado. La fe no se cuestiona y cada uno hace lo que puede para acercarla y despojarse de ella. Más allá de debates teologales, durante esta semana, España prueba ser una suerte de Jerusalén de hace dos mil años y los ciudadanos de Sevilla, Murcia, Valladolid, Zamora o Lorca imitan ese gesto ancestral tan humano: traicionan o perdonan, son fariseos o fieles discípulos, escuchan cantar al gallo o preparan los clavos y los maderos, pero todos acompañan a un hombre desnudo a morir en la cruz.

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