El Partido del Pasado

Pero ¿y qué tipo de partido será? ¿La enésima escisión de las izquierdas que –ahora sí que sí que me caiga un rayo si miento– nos devolverá la ilusión perdida al rojerío patrio? Creo que prefiero lo del rayo. ¿Un partido liberal-liberal que reúna a los huérfanos de UPyD, Cs, etc.? Diablos, no. Eso tiene menos futuro que los NFT. ¿Y qué tal un nuevo partido regionalista murciano para barrer para adentro en Madrid como hacen otros? Meh. ¿Tú ves muchas pulseritas granate por la calle? Pues esa es la encuesta interna que manejo.

Mi idea no va de copiar modelos ya estrellados. Mi flamante partido se basará en una propuesta nueva (es un decir): volver al pasado. Sí, al pasado. ¿Sabéis la segunda ley de la termodinámica? Nosotros no creemos en ella. No la vamos a respetar. Nos declaramos en rebeldía contra esa imposición absurda y liberticida que nos dicta la Física con sus típicas formas totalitarias y antidemocráticas. Porque vamos a ver, ¿quién ha votado eso de que mañana tenga que ser domingo? Yo no, desde luego. Por mí podría ser viernes otra vez. ¿En qué referéndum aprobamos que los años sigan una cuenta creciente? La primera ley de mi Partido del Pasado, de ganar las elecciones, será la de contarlos hacia atrás. ¿En qué año echaste tu primer kiki? Si nos votas, pronto volverá a suceder.

Sí, ya, ya lo sé. El plural que estoy usando es obviamente mayestático. Pero, ¿solo mayestático? ¿No está el germen del Partido del Pasado en más de una y más de dos cabecicas calenturientas más además de la mía? El presente es un coñazo: no se entiende nada, nadie te resume, todo son amenazas, prohibiciones, gente quejándose por cosas, profecías apocalípticas y menos Cheetos en cada bolsa que te compras. Y no te digo nada ya el futuro. Madre del amor hermoso cómo viene el futuro entre cambio climático 'peak oil', destrucción del medio ambiente, pérdida de todo tipo de valores de los que nos inculcaron en la EGB y bandas tributo. Antes invierto en NFT que en la mierda esta del futuro, fíjate lo que te digo. ¿Y qué pasa cuando las inversiones habituales pierden atractivo? Pues que la gente bien reestructura su cartera con valores refugio. El oro, por ejemplo. Y, si hablamos de política, el pasado.

Pero ¿qué pasado? ¿Es necesario apostarlo todo al Antiguo Régimen o con los tiempos de 'Verano Azul' ya nos vale? Eso es lo mejor: no es necesario concretar. Lo de toda la vida, en sentido amplio. Todo tiempo pasado, en general, fue mejor. Pero ¿fue mejor de verdad? ¿Había menos violencia de género, por ejemplo? Bueno, no, claro. Había más, pero no se contabilizaba, ni se prevenía, ni se denunciaba. Si no la sufrías tú directamente vivías mejor, sin ese runrún en la cabeza que nos tiene para coger un camino, a los del Partido del Pasado. Qué rollo por favor. Y así un poco con todo. El medio ambiente se masacraba con total impunidad, pero lo llamábamos progreso y no nos daban la chapa con el tema todo el rato. Eso es lo mejor del pasado: que nadie te daba la brasa. Eso y que tenías pelo.

Entiéndase brasa: feministas, ecologistas, activistas, antifascistas, antirracistas... Toda esa gente que insiste en que hay que cambiar cosas y además tiene razón. No hay manera de sortearlos: si cruzas la calle por la acera de enfrente hay otros. ¿No hay manera? Efectivamente: volviendo al pasado. Cuando a tu vecina del quinto le daba el marido una somanta a la semana y tú te callabas porque eran cosas suyas. Y no hacía falta separar ni el plástico ni el cartón. Y fumaba hasta el médico en la consulta. Y no había inmigrantes porque los que emigrábamos éramos nosotros.

Lo voy a petar, con el Partido del Pasado. O más bien puede (con esto de derogar la termodinámica ya me lío un poco, perdón) que se me hayan adelantado.