Ábalos rechaza investigar los contratos de su exnovia en dos empresas públicas

Ábalos incide en que la propia Ineco, sociedad dependiente de Transportes, ya justificó en un escrito que Rodríguez tuvo un horario que superó más de 3.648 horas de trabajo en su condición de auxiliar administrativa desde el 1 de marzo de 2019 al 28 de febrero de 2021, al tiempo que subraya que «su incorporación fue inscrita por encargo de ADIF Alta Velocidad». Para el exministro, la acusación popular unificada no explica la relación que las diligencias reclamadas guardan con el objeto de investigación de la presente causa. «Únicamente se quiere conseguir la dilación en el tiempo de la presente», alega.

La petición del PP de investigar los contratos laborales tiene lugar después de que la mujer, en su declaración como testigo ante el juez del Supremo Leopoldo Puente, asegurara que estuvo contratada en Ineco, «imagina», por mediación de Ábalos y que nunca llegó a realizar trabajo alguno, aunque sí cobro unos mil euros mensuales. Su cometido, según explicó, era ser auxiliar administrativa del hermano de Koldo García, su jefe, que también desmintió este extremo en su declaración.

A raíz de dicha afirmación, Ineco envió a sus empleados un mensaje interno en el que aseguraba que Jésica Rodríguez llegó a enviar un parte diario «detallando las tareas desarrolladas». La empresa pública entregó a la Fiscalía Anticorrupción la documentación que lo acredita con el objetivo de esclarecer el testimonio prestado por la mujer el pasado 27 de febrero. En un comunicado posterior, emitido el mismo día, Ineco subrayó que las declaraciones realizadas en relación a su vinculación laboral con la empresa no coincidían con la documentación interna existente y «los actos propios que ella misma dejó registrados».

En el marco del escrito, la defensa del exministro también hace referencia a los viajes que hubiera podido realizar con su entonces pareja. «Entendemos que quedó perfectamente aclarado con la declaración de la que fuera secretaria en el ministerio, (...) que manifestó que todos los viajes eran gestionados por el servicio de protocolo, por ende, nunca Ábalos tuvo oportunidad de intervenir en los viajes que ahora se pretende imputarle», apunta el escrito.

«No existe hasta la presente fecha que se haya practicado ninguna diligencia que acredite que ningún viaje fuese abonado por el Ministerio de Transportes», subraya, al tiempo que critica que se esté «pretendiendo dar una veracidad a lo publicado en fuentes abiertas». Con todo, asegura que en la auditoría realizada por el actual ministro de Transportes, Óscar Puente, «no ha aparecido ningún dato que revele que realizó algún viaje con fondos del ministerio».

En su declaración como testigo, Rodríguez aseguró que viajaba con Ábalos prácticamente todos los meses cuando eran pareja, calculando un total de entre 15 o 20 y a lugares como Londres, Moscú o Sevilla. Indicó que tampoco pagó nada por los viajes, que cuando los gastos no los asumía Ábalos lo hacía Koldo; si bien matizó que cuando su entonces asesor pagaba, luego el exministro se lo abonaba.