La Policía Local de Yecla utiliza pistolas de gas pimienta para reducir a un sujeto violento

Un vecino de Yecla llamó a la jefatura de la Policía Local de Yecla sobre las 21 horas de este lunes para avisar de que un hombre se estaba autolesionando con una cuchilla profesional en plena calle. Agentes de la Policía Local y Nacional se desplazaron hasta el lugar de los hechos, donde comprobaron que el sujeto estaba amenazando con cortarse el cuello y con rajar al que se le acercara.

Según relata la Policía Local, «en el inicio de la intervención por los agentes, que previamente había requerido la presencia de una unidad medicalizada, consiguieron convencerle para que depusiera su actitud». Así, el individuo fue atendido en la calle e introducido en la ambulancia sin la cuchilla.

Poco después, el varón consiguió zafarse de los sanitarios y salió de la ambulancia más agresivo y con otra cuchilla que ocultaba en un bolsillo. En ese momento, volvió a proferir amenazas graves hacia los agentes, sanitarios y vecinos que se encontraban en la zona.

Una vez fuera de la ambulancia, el sujeto se dio a la fuga mientras continuaba con las amenazas. Los agentes policiales establecieron un cordón de seguridad para insistir en que depusiera su actitud. «Tras varios intentos negándose a hacerlo y viendo la escala de agresividad que mostraba, los agentes de Policía Local utilizaron las pistolas de gas pimienta en su poder para reducirle», explican desde este cuerpo de seguridad.

Los efectivos se vieron en la necesidad de disparar hasta en cuatro ocasiones hasta que el sujeto depuso su actitud y los agentes de Policía Nacional aprovecharon para detenerle definitivamente. El varón fue detenido por resistencia activa grave y amenazas. Posteriormente, los policías le trasladaron al hospital Virgen del Castillo para su evaluación psiquiátrica. Uno de los agentes presentó lesiones en la intervención, y el resto precisaron atención médica por leves secuelas.

El uso de este tipo de armas no letales, JPX, que la Policía Local tiene como dotación, se está convirtiendo en una herramienta eficaz para evitar lesiones más graves que otro tipo de armas producen y ante situaciones que impiden a los agentes esgrimir sus armas de fuego reglamentarias. Se trata de armas de gas pimienta que provocan al sujeto irritación en las mucosas nasales sin causarle mayores daños.

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