Los regantes de la Región se aseguran agua desalada para diez años y solicitan que se mejore el precio

El presidente de la CHS, Mario Urrea, señaló habrá más, ya que pondrá a disposición de los regantes otros 25 hectómetros que estaban asignados a los abastecimientos de la población; y a medio plazo se producirán otros 60 hectómetros con la nueva desaladora de gran capacidad que ya se está estudiando.

El Sindicato de Regantes del Trasvase (Scrats) expresó a través de su presidente, Lucas Jiménez, su «alegría y enhorabuena» por estos convenios largamente negociados, aunque apuntó que hay que mejorarlos. Tanto el Scrats como el presidente de la CHS indicaron que el agua desalada es un «complemento» a los recursos del Trasvase y de los acuíferos.

En este sentido, el futuro del Trasvase Tajo-Segura planeó sobre el ambiente, ya que los regantes insistieron en que no renuncian a estas transferencias y que rechazan el recorte programado, a expensas de los recursos presentados en el Tribunal Supremo contra la subida de los caudales ecológicos en el Tajo. No obstante, indicaron que necesitan todos los recursos disponibles, entre ellos el agua desalada. Las firmas dan carta de naturaleza a una situación que ya existe de facto, puesto que la subvención del agua desalada ya se aplica desde principios de año mediante una orden ministerial. Ahora se ha formalizado en los contratos con una garantía de suministro para diez años.

En un acto que tuvo lugar en la sede de la Cámara de Comercio de Murcia, al que asistieron la plana mayor del agua del Ministerio y de Acuamed, entre ellos el director general Teodoro Estrela y el responsable de la sociedad estatal, Francisco Javier Baratech, así como la consejera de Agricultura del Gobierno regional, Sara Rubira, y el secretario general de Agua de la Junta de Andalucía, Ramiro Angulo, los representantes de las comunidades de regantes fueron estampando sus firmas, tanto los que tienen asignaciones de Torrevieja, como los de Águilas, representados por Juan Marín Bravo. Los usuarios de Valdelentisco vendrán después.

Estos dispondrán de 70 hectómetros con la ampliaciones de las desaladoras, a los que se sumarán otros 25 hectómetros que tenía asignados Canales del Taibilla, para lo cual se abrirá el proceso de concesión en enero, indicó Mario Urrea. Este detalló que la CHS ya estudia la construcción de otra desaladora de gran capacidad, como avanzó LA VERDAD. Su capacidad de producción será como mínimo de 60 hectómetros anuales, para lo cual se está buscando ubicación. Será una inversión añadida a los 600 millones ya comprometidos. Urrea recalcó que la desalación es «un complemento» al Trasvase, en un mix en el que se integran también los acuíferos y las aguas residuales regeneradas.

La firma era un acto muy esperado por el Ministerio, después de años de negociaciones. Hugo Morán indicó que «no hay perdedores ni ganadores; todos ganamos». Añadió que seguirá habiendo «encuentros y desencuentros», pero que «el diálogo llama al diálogo», y puso como ejemplo este acuerdo. Reconoció que a los regantes les gustaría que el agua fuera «más barata»; sin embargo indicó que se ha encontrado un punto de acuerdo intermedio teniendo en cuenta que «partíamos de unas posiciones inasumibles para las partes». «No renunciamos a que los precios puedan ser más baratos», añadió en referencia al escenario de los costes energéticos dentro de cinco años y al acuerdo alcanzado al respecto en el seno de la UE.

Al ser preguntado sobre el posible déficit de 400 hectómetros en el año 2027, por la incidencia del recorte del Trasvase y el cierre de acuíferos, Hugo Morán recordó que cuando él llegó al Ministerio en el año 2018 «se hacían algunas predicciones catastróficas respecto a que, en el periodo de gobierno que se avecinaba, se iba a producir un recorte brutal de recursos». Añadió que el resultado final revela que «los recursos que se han puesto a disposición superan bastante los volúmenes de los cinco años anteriores».