Borrar
Cabecera de la multitudinaria manifestación del 8-M del pasado año, a su paso por la Gran Vía de Murcia. G. Carrión / AGM
Promesas y realidades, un año después

Promesas y realidades, un año después

La falta de consenso lastra las principales medidas puestas en marcha por el Gobierno regional

Viernes, 8 de marzo 2019, 02:13

Murcia. Las mujeres de la Región de Murcia volverán a echarse hoy a la calle para reivindicar mayores avances y más rápidos para lograr la plena igualdad. La jornada volverá a estar marcada por los llamamientos a la huelga realizados por diversas organizaciones y por un ambiente festivo y reivindicativo.

El 8-M del 2018 constituyó un punto de inflexión por la multitudinaria respuesta que tuvieron las convocatorias con motivo del Día Internacional de la Mujer, lo que despertó también la sensibilidad de las administraciones públicas. Un año después, sin embargo, la situación de las murcianas apenas ha variado a causa de la limitada repercusión de las iniciativas adoptadas y de la enorme dimensión del problema.

La oposición y los sindicatos abandonaron al Ejecutivo en el último momento en el Pacto contra la Violencia de Género y el plan frente a la brecha salarial

No solo las mujeres sufren el desempleo en mayor medida -representan el 61% del total de parados de la Región en febrero-, sino que además soportan el 75% de los contratos a tiempo parcial y son el 99% de las solicitantes de excedencia y reducción de jornada laboral, amén de que cobran entre el 24,7% y el 26,6% menos, según los estudios, que los hombres en el mismo empleo.

El Gobierno regional ha puesto en marcha en los últimos meses dos importantes herramientas en favor de la mujer. Sin embargo, la relevancia de ambas quedó ensombrecida por la falta de consenso y la polémica que rodeó su génesis.

Medidas a destacar

  • Pacto contra la Violencia de Género Suscrito por PP y Cs, PSOE y Podemos se desmarcaron a última hora en protesta al calificar el Gobierno de «fracaso» el aborto en la ley de Protección de la Familia.

  • Estrategia contra la brecha salarial El Gobierno lo anunció hace un año y lo presentó el pasado lunes, pero con la incomparecencia de UGT y CC OO, que lo acusaron de «desleal y electoralista».

  • Programa Retorno Madre Quince madres de niños de hasta 3 años salieron del paro en 2018 gracias a las ayudas del SEF.

  • Observatorio para la Igualdad Recogido en la ley regional por la Igualdad de 2007, sigue sin ponerse en marcha. Hace unos días, el decreto de creación pasó por el CES.

La primera fue el Pacto contra la Violencia de Género. Fue negociado entre los cuatro grupos parlamentarios (PP, PSOE, Podemos y Ciudadanos), pero finalmente los partidos de izquierdas se desmarcaron y rechazaron firmarlo en protesta por la alusión al aborto como «fracaso» que el Ejecutivo incluyó en el texto de la ley de Protección de la Familia.

De esta actuación, la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Violante Tomás, resalta que «el diálogo con las empresas y su predisposición ha conseguido que sean cómplices y parte de la solución gracias a su sensibilidad para ayudar a la inserción laboral de las víctimas de violencia de género».

Otro plan con buenas intenciones, pero deslucido en su ejecución, es la Estrategia para la Eliminación de la Brecha Salarial. El Gobierno regional lo anunció hace un año y lo cerró en septiembre con empresarios y sindicatos, pero tardó tanto en presentarlo que para cuando lo hizo, el pasado lunes, CC OO y UGT le acusaron de «deslealtad institucional» y de buscar el interés electoral y no asistieron a su presentación.

La Consejería de Familia e Igualdad apunta, además, entre las iniciativas puestas en marcha el pasado año el programa Retorno Madre, cuyo objetivo es favorecer la reincorporación al mercado laboral de las mujeres que han sido madres, y el protocolo de inserción sociolaboral de mujeres víctimas de violencia de género. Y anuncia para este año un programa de apoyo a la maternidad y dos iniciativas más dotadas en total con 50.000 euros en favor de la mujer rural y de las inmigrantes.

En cambio, sigue pendiente la creación del Observatorio por la Igualdad, previsto en la ley regional por la Igualdad de 2007, y cuyo decreto de puesta en marcha fue remitido el mes pasado al Consejo Económico y Social (CES).

Escasa conciliación

Gloria Alarcón, vicesecretaria general del PSRM-PSOE, echa de menos, sobre todo, medidas eficaces para permitir la conciliación de la vida familiar y laboral. «Esa es la clave», declara. «Me preocupa cuando una mujer debe decidir si trabaja o es madre. Las políticas activas de empleo para la mujer están bien, pero no sirven de nada si luego tiene que renunciar a su carrera profesional para ser madre», agrega.

Contraste de opiniones

  • Violante Tomás. Consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades: «Hay que formar en igualdad» La consejera destaca la puesta en marcha del Pacto contra la Violencia de Género, que «implica a la sociedad y a las administraciones. Un texto en el que la mayor parte de las medidas se encaminan hacia la educación porque hay que formar en igualdad a los adultos del futuro para conseguir una sociedad realmente igualitaria».

  • Gloria Alarcón. Vicesecretaria de Economía e Igualdad de Género del PSRM-PSOE: «No hay un verdadero interés» «Las actuaciones que se han adoptado son muy tímidas. Creo que no hay un verdadero interés», indica la vicesecretaria general del PSOE. Alarcón cree que «se podía haber hecho infinitamente más», sobre todo en materia de conciliación de la vida familiar y laboral. «La falta de conciliación es el origen del mal», opina.

  • Mª Eugenia Pérez. Secretaria de Política Social, Seguridad Social y Participación Sindical de UGT: «Queda mucho por hacer» La dirigente sindical opina que «queda mucho por hacer». «En violencia de género ha habido algún avance, pero en igualdad no se ha hecho nada trascendental. Uno de los planes más importantes era el de la lucha contra la brecha salarial y se ha cerrado en falso, y el observatorio por la igualdad ni siquiera se ha creado».

Por ello, la dirigente socialista reclama que la educación de 0 a 3 años sea obligatoria, y también residencias para mayores en mayor número y más económicas y centros de atención para los dependientes, dos colectivos cuyos cuidados suelen recaer en la mujer.

María Eugenia Pérez, secretaria de Política Social de UGT, destaca que el principal cambio que propició el histórico 8-M del pasado año fue la creación de «una conciencia social muy grande» en favor de la igualdad, pero «los avances han sido muy pocos». «Hay que propiciar un cambio social y legal muy grande, en la Región y en España, y para eso hay que ser consciente de que el 8-M no es una moda, ni un día al año, sino una lucha que debemos librar los 365 días del año», señala.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

laverdad Promesas y realidades, un año después