La polémica sobre el peaje en las autovías devuelve la inquietud a los transportistas

Perezcarro recordó que el sector se opone frontalmente al peaje en las autovías, y se remitió al compromiso del Gobierno de que no adoptaría ninguna medida sin contar con este colectivo «No sabemos si existe o no ese compromiso con la UE; y tampoco si la medida va a entrar en vigor el año que viene, lo cual sería imposible porque antes habría que crear la infraestructura y el sistema de cobro, que lleva su tiempo». Recalcó que el peaje sería «un disparate», temiendo que al final sean los camiones los que paguen la política de descarbonización y mantenimiento de la red, y no todos los usuarios. Perezcarro advirtió de que sería inasumible pagar 10 o 15 céntimos por kilómetro para trayectos de 900 kilómetros hasta la frontera francesa, como se planteó hace dos años.

En aquel momento, cuando el Ministerio barajó la posibilidad de establecer el peaje en las autovías, Froet estimó que la medida le costaría al sector más de 63 millones de euros al año. Un camión pagaría en torno a 56 euros para ir desde la Región de Murcia a Madrid. Si se trataba de un vehículo particular, esa tasa sería de 12 euros.

Un informe realizado en el año 2018 por la consultora estatal Ineco, estableció una tarifa de peaje de 1,7 céntimos para los turismos y de 2,8 para los camiones, como promedio. Realizó un estudio por comunidades autónomas del volumen de tráfico que podría verse afectado y de los puntos de control y pago de peaje. En la Región de Murcia hizo una estimación de 235.000 vehículos diarios, de los que 210.000 eran ligeros.

Sobre esta base, habría una repercusión anual de entre 65 y 187 euros por vehículo; y de 1.224 y 4.608 euros para los camiones. La variación dependía de si se pretendía financiar el nivel actual o el nivel óptimo de mantenimiento de las carreteras de alta capacidad. Influía asimismo la relación del peaje entre los diferentes tipos de vehículos. Es decir, si existe una proporción de 1,7 a 1 entre turismos y camiones, o de 3 a 1.

A mediados del año 2021, el Gobierno de la nación barajó aplicar entre 1 y 2 céntimos por kilómetro para los vehículos ligeros, que consideró un 'peaje blando'. La medida, que tenía un grado de aceptación social «muy bajo», quedó aparcada. El estudio realizado por Ineco analizó en la Región de Murcia quince posibles puntos de control de pago, con una distancia de 50 kilómetros, 8 de ellos de la red autonómica, siempre que el Gobierno regional accediera a implantarlos.

Ante los diferentes sistemas de pago, principalmente la viñeta y los pórticos o postes (incluso una mezcla de ambos), la consultora propuso el segundo modelo. La viñeta, más rápida de aplicar, implica que el usuario pague un sello durante un tiempo, use o no las autovías; mientras que el segundo grava directamente a quien utilice los tramos tarifados. El principal inconveniente del sistema de arcos o pórticos es que su implantación resultaría muy compleja y costosa.

El candidato del PP al Senado, Francisco Bernabé, denunció ayer «la imposición, por parte del Gobierno de Sánchez, de peajes en las autovías españolas a partir de 2024». «El Gobierno de España aprobó el Plan de Recuperación, que incluye este impuesto, a cambio de fondos europeos tras el Covid». Dijo que Pedro Sánchez «le negó a Feijóo la imposición de esta tasa, pero el director general de Tráfico afirmó que estos peajes serán una realidad».