La nueva especialidad de Urgencias llega al rescate de unos servicios deficitarios en la Región de Murcia

Después de décadas de espera, el Consejo de Ministros aprobó este martes la nueva especialidad de Urgencias y Emergencias, que llega en un momento especialmente crítico por el déficit de facultativos. Los servicios de Urgencias se nutren fundamentalmente de médicos de familia, lo que obliga a hospitales y centros de salud a competir por unos profesionales que escasean. El problema está quedando en evidencia este verano. Las dificultades para reforzar las plantillas durante el periodo vacacional han derivado en protestas en los servicios de Urgencias de la Región de Murcia.

El decreto de este martes no resuelve la situación de la noche a la mañana, pero sienta las bases para que este déficit pueda empezar a corregirse. Todo indica que las primeras plazas MIR de Urgencias y Emergencias se convocarán en 2026, con lo que estos médicos se incorporarán como especialistas en 2030. Paralelamente, unos 500 facultativos que llevan años trabajando en los servicios de Urgencias hospitalarias y de Atención Primaria (los SUAP) de la Región de Murcia serán reconocidos como especialistas. Tendrán que demostrar cuatro años trabajados en estos servicios durante los últimos siete. Para quienes no lleguen a esos cuatro años habrá una prueba de capacitación.

«Estamos de celebración, es algo que llevábamos mucho tiempo esperando», subraya Pascual Piñera, vicepresidente de la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (Semes) y jefe de Urgencias del Hospital Reina Sofía. «La creación de la especialidad es importante porque permitirá planificar de forma adecuada los recursos humanos, tanto en Urgencias como en Primaria», destaca. En este sentido, el decreto aprobado en el Consejo de Ministros cuenta con el consenso de diferentes sociedades científicas que representan a los médicos de familia. Es un paso que beneficiará a todo el Sistema Nacional de Salud, resume Piñera.

El vicepresidente de Semes calcula que la sanidad murciana necesitará entre 15 y 18 plazas MIR de la nueva especialidad al año, aunque esto es algo que todavía debe planificarse con la Consejería de Salud. Todo dependerá de los recursos disponibles, porque la formación MIR «es cara», recuerda el jefe de Urgencias del Reina Sofía. El primer paso será acreditar las unidades docentes.

El decreto aprobado por el Consejo de Ministros este martes pone fin a una anomalía en el contexto de la Unión Europea: la Medicina de Urgencias ya estaba reconocida en 22 países europeos. El presidente de Semes, Vázquez Lima, destaca la «gran relevancia» de esta medida «para la sanidad de nuestro país» y para «todos los urgenciólogos, que por fin vemos reconocido nuestro esfuerzo, vocación y dedicación». La especialidad arranca con el consenso del Ministerio de Sanidad y las comunidades. Los ciudadanos pasarán a ser atendidos por «especialistas con una formación reglada, homogénea y reconocida, independientemente de dónde residan».

La ministra portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, explicó este martes que «la formación tendrá una duración mínima de cuatro años, los dos primeros serán comunes a la especialidad de Medicina de Familia y Comunitaria, y la norma establece un procedimiento para que los profesionales en una de las dos especialidades puedan obtener el título de la otra mediante una prueba de evaluación y un periodo formativo».

Por su parte, la ministra de Sanidad, Mónica García, destacó que la creación de la nueva especialidad «va a mejorar los recursos humanos del Sistema Nacional de Salud permitiendo identificar mejor el personal en formación, hacer estimaciones sobre el número de profesionales disponibles a futuro y contrastarlo con las necesidades de pacientes y sistema sanitario».

La Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen) reclamó que el programa formativo de la nueva especialidad no obstaculice ni interfiera en la formación de los residentes de Medicina de Familia. «El periodo formativo incluiría amplios periodos en común para las dos especialidades. Ya que se ha creído necesaria la creación de una nueva especialidad y no de un Área de Capacitación Especifica, deberían tener programas formativos independientes», señaló esta organización en un comunicado.

Los médicos de los servicios de Urgencias de los hospitales de la Región protagonizan protestas desde abril ante la falta de refuerzos disponibles para el verano. La mecha prendió primero en el hospital Reina Sofía y el Santa Lucía, y se extendió al Rafael Méndez de Lorca y al hospital de La Arrixaca, donde la semana pasada se llevó a cabo una concentración.

Los facultativos reclaman plantillas mejor dotadas y sus quejas van más allá de la situación coyuntural de este verano, agravada por el retraso en la incorporación de la última promoción de MIR de Medicina de Familia, que no terminará su periodo de formación hasta septiembre, cuando habitualmente finaliza en el mes de mayo.

Los intentos de Gerencias de algunos hospitales por retrasar las vacaciones de parte del personal generaron especial malestar entre la plantilla.

La Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (Cesm) celebra la creación de la nueva especialidad, pero advierte de que la medida viene acompañada de «un reto importante, que es el de mejorar las condiciones laborales de los servicios de Urgencias». Cesm recuerda que las «jornadas continuas de trabajo tienen una actividad similar a cualquier hora o día de la semana, con especial penosidad y siendo uno de los sectores con mayor tasa de temporalidad».

El Ministerio de Sanidad anunció el fin de las guardias de 24 horas, una medida que no es fácil de aplicar y que ha generado un intenso debate entre los profesionales y las organizaciones médicas.

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