La CHS necesita cubrir más de 200 puestos, muchos de ellos para atender el Mar Menor

Uno de los organismos más relevantes de la Administración estatal en la Región arrastra una importante falta de medios. Las crecientes actuaciones que se llevan a cabo en la comarca del Mar Menor, que concitan una gran interés social, han acentuado ese déficit de personal.

Además de los expedientes sancionadores por riego ilegal, que llevan un largo proceso hasta su culminación, la Confederación también tiene que hacer cumplir las medidas cautelares para la protección del acuífero del Campo de Cartagena, lo cual significa que tiene que dar curso los próximos meses a más de 3.000 expedientes de acreditación por parte de los dueños de parcelas agrícolas.

Necesita refuerzos, y una de las medidas que acaba de adoptar el Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco) ha sido la próxima incorporación de 24 técnicos a cargo de la empresa estatal Tragsa, que darán apoyo a los funcionarios de la Confederación encargados de los trámites sancionadores y del desarrollo de las actuaciones en el ámbito del Mar Menor. Estos efectivos son solo una parte de los 115 que se precisan.

En la actualidad, la CHS cuenta con 227 puestos de funcionarios, de los cuales están vacantes 42, lo que supone un 18,50%, informa el organismo de cuenca. Estos puestos son ofertados periódicamente para su provisión en los concursos de traslados que convoca el Miteco. Recientemente se ha resuelto el concurso general convocado el pasado mes de enero, en el que han quedado vacantes tres puestos de los trece ofertados. Asimismo, se está preparando la próxima convocatoria de un nuevo concurso para puestos específicos, en el que la Confederación ha incluido 14 plazas.

En cuanto a personal laboral, la CHS cuenta con 204 plazas, de las cuales están vacantes 64, lo que supone un 31,37%. Se trata principalmente de personal vinculado a la Comisaría de Aguas que realiza funciones de control de embalses, así como agentes fluviales y vigilantes de obras en la demarcación, dentro de las labores de control del dominio público hidráulico.

Estos puestos se cubren a través de las ofertas de concursos de traslados abiertos y permanentes que se convocan anualmente. Los que no se cubren se incluyen en la Oferta de Empleo Público para promoción o acceso libre. En marzo se incluyeron 30 plazas en este doble sistema. Asimismo, a través de una oferta interna del Miteco, de 363 plazas, la CHS ha solicitado 17 para la demarcación.

Aparte de las vacantes que hay que cubrir de funcionarios y del personal laboral, se necesita más personal de apoyo para hacer frente a los servicios que tiene encomendados la Confederación. Recientemente se ha elaborado por parte del Miteco el Plan Estratégico de Recursos Humanos en las Confederaciones Hidrográficas y en la Mancomunidad de los Canales del Taibilla, dentro del cual se han solicitado 115 puestos adicionales a los ya existentes que se irán cubriendo a través de futuras ofertas de empleo público. La semana pasada se acordó la incorporación de 24 técnicos, de cuyo proceso se encargará Tragsa.

Dentro de este plan estratégico, 30 puestos serán de nueva creación en la CHS (2 para Presidencia, 12 en la Comisaría de Aguas, 7 en la Dirección Técnica, 4 en la Oficina de Planificación, y 5 en la Secretaría General). De cara al futuro, y dentro de las sucesivas convocatorias de empleo público de los próximos años, la CHS prevé incrementar su plantilla en 35 plazas de funcionarios y 50 de personal laboral.

Con motivo del Foro Futuro en Español organizado por LA VERDAD, el presidente de la Confederación, Mario Urrea, señaló que la falta de medios lastra la gestión hídrica de las cuencas y las labores que tienen asignadas. «Nos encontramos en una situación muy precaria. No podemos dar el servicio que se debe». Urrea se preguntó «quién va a ser capaz de ejecutar los 3.000 millones que tiene el plan del Segura en seis años», y recalcó que deben llegar refuerzos.

La Consejería de Agricultura y Medio Ambiente, por su parte, tiene actualmente 248 personas trabajando en las medidas de protección y recuperación del Mar Menor, informó un portavoz. Se dedican a la monitorización, inspección, expedientes, formación y asesoramiento, vigilancia ambiental y limpieza.