Ribera Hospital de Molina reduce su huella de carbono al instalar placas solares

Ribera Hospital de Molina ha conseguido recientemente «la certificación de verificación del cálculo de Gases de Efecto Invernadero, con la norma GHG Protocol, que valida el cálculo del centro molinense sobre las emisiones de gases (Alcance 1 y 2) emitidos al medio ambiente», explican desde el centro sanitario. Con este sello refrendan su compromiso con la descarbonización y sostenibilidad de su actividad.

Esta certificación garantiza que «el hospital cumple de forma rigurosa con el cálculo desglosado de sus emisiones totales; que realiza periódicamente auditorías internas y externas para el control de los consumos; y que cada año se marca objetivos de reducción de la huella de carbono», detallan desde el centro hospitalario molinense.

Ribera Hospital de Molina ha implantado en los últimos tiempos una serie de medidas y acciones para reducir su impacto en el medio ambiente. Entre ellas, ha montado recientemente una instalación fotovoltaica de autoconsumo en su cubierta, para reducir su dependencia de la energía eléctrica, avanzando así en su compromiso con la sostenibilidad, al que se suman «todos los profesionales. Y –aseguran– seguimos trabajando para continuar mitigando el impacto de la actividad de nuestros hospitales sobre el medio ambiente».

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