Más de la mitad de quienes acuden a Urgencias en la Región de Murcia son conscientes de que su problema no es grave

Que una elevada proporción de pacientes acude a Urgencias del hospital pese a sospechar que su problema no es grave es algo que vienen reflejando las encuestas desde hace tiempo. Pero es en 2024 cuando, por primera vez, este porcentaje supera el 50%. Al presidente de la Sociedad Murciana de Medicina de Urgencias y Emergencias (Semes), Pascual Piñera, el dato no le sorprende. Lo achaca al aumento de las listas de espera en los últimos años y a los problemas de accesibilidad en Atención Primaria. «La gente intenta resolver su problema de la forma más eficiente o cómoda. Cada vez vienen más pacientes», explica. Las Urgencias hospitalarias de la Región de Murcia atendieron 1.137.662 consultas en 2022 (todavía no hay datos disponibles de 2023). Son 190.400 más que en el ejercicio anterior (cuando todavía se dejaba notar la pandemia) y 38.379 más que en 2019, cuando aún no había irrumpido la crisis sanitaria.

Detrás de estos elevados números se esconde una alta frecuentación. En 2022 se contabilizaron 743 urgencias hospitalarias por cada mil habitantes en la Región. Es una tasa que solo superan Madrid (815) y Baleares (795).

La afluencia a Urgencias ha aumentado a la par que se incrementaba la presión sobre la Atención Primaria. A medida que a muchos pacientes les resulta más difícil conseguir sin demora cita con su médico de familia, se incrementa la frecuentación al hospital, advierte Piñera.

No obstante, la encuesta de Calidad Percibida del SMS refleja que el 77,9% de quienes acuden a Urgencias consideran que su problema, pese a no ser necesariamente grave, no puede resolverse en su centro de salud. «Habría que ahondar en esa pregunta. ¿Creen que no se puede resolver en Primaria porque no consiguen cita para los días siguientes, o porque consideran que van a necesitar pruebas para las que van a tener que esperar?», reflexiona el presidente de Semes. Es posible que muchos pacientes no sean conscientes de que Primaria es ahora más resolutiva y sus profesionales pueden realizar o indicar más pruebas, en muchos casos de forma urgente, apunta.

De lo que no cabe duda es de la elevada satisfacción de los pacientes con la atención que reciben en los distintos niveles asistenciales, según la encuesta. La valoración más alta la reciben los servicios de pediatría y obstetricia de los hospitales, con una puntuación de 9,1. Respecto a Atención Primaria, los 3.400 usuarios encuestados valoran con un 8,3 de media su satisfacción global con el centro de salud. Destaca la valoración del trato dispensado por médicos y enfermeros (el 96% lo considera bueno o muy bueno).

Los servicios de urgencias de Atención Primaria (SUAP) mejoran sus resultados en relación con 2023, con una valoración media de un 8,2. En Urgencias hospitalarias se llega al 8,4. De nuevo, los profesionales son puntuados con nota.

Pese a que la estadística de listas de espera refleja elevadas demoras en muchos servicios, lo cierto es que el 79,8% de los encuestados valoran como «muy bien o bien» el tiempo que tuvieron que esperar hasta el día de la consulta con el médico especialista. Peor valoración recibe, en este sentido, la red de Salud Mental. El 42% de quienes fueron derivados a estos centros valoran como regular, mal o muy mal el tiempo de espera hasta su cita con el psicólogo o psiquiatra, frente a un 57,8% que se muestra satisfecho.

La valoración de la atención recibida en los hospitales es en general muy buena, con una nota de 8,7. La comida es el aspecto peor valorado, aunque también aprueba.