

Secciones
Servicios
Destacamos
Aunque aún no es obligatorio, la gran mayoría de las industrias cárnicas de la Región de Murcia se han adelantado y ya cuentan con sistemas ... de videovigilancia en sus instalaciones para garantizar el bienestar animal y la seguridad alimentaria. Una medida que aprobó el pasado martes el Consejo de Ministros a través de un real decreto y que da el plazo de un año a los mataderos grandes para instalar un circuito cerrado de cámaras que se adapte a las exigencias que marca la norma del Gobierno central. Las instalaciones pequeñas -en las que no se sacrifican más de 40 unidades de ganado mayor a la semana, con un máximo de 2.000 anuales, según el Ministerio de Consumo- tendrán el doble de margen para cumplir la ley.
De los 15 mataderos que hay en activo actualmente en la Región de Murcia -tanto industriales como tradicionales-, 11 tienen ya instalados sistemas de videovigilancia que sirven como herramienta para controlar que los animales reciben un trato correcto y no sufren durante su sacrificio, según confirman desde la Consejería de Salud. La mayoría de estos mataderos se dedican al porcino, seguido del ovino, caprino, aves, bovino y conejos.
En el caso de ElPozo Alimentación, la industria cárnica más importante del territorio regional, hay cámaras instaladas en todas las zonas de su centro de procesamiento ubicado en Alhama, en el que se produce manipulación de animales vivos, hace más de cuatro años. Desde la compañía destacan sobre la nueva norma que «cualquier medida que esté orientada al bienestar animal y a garantizar la seguridad alimentaria es bienvenida. El consumidor está en el centro de nuestra estrategia y la calidad y seguridad de los alimentos que comercializamos es nuestra prioridad número uno». En cuanto a las imágenes que graban las cámaras, las mismas fuentes detallan que «son monitorizadas por el Servicio de Veterinarios Oficial de la Comunidad Autónoma y almacenadas durante un mes».
El Cabezo Centro Cárnico, en Cañadas de San Pedro, también apostó hace cuatro años por la instalación de cámaras en su matadero del Cabezo de la Plata. «Las tenemos puestas en todo el proceso, incluso en las zonas de descarga de animales, aunque ahí no va a ser obligatorio. Los inspectores pueden ver en tiempo real cómo trabajamos», explica Francisco de Borja, responsable de Calidad de esta empresa con amplia trayectoria.
Murgaca, en Cartagena, es otro de los mataderos de la Región que se ha adelantado a la norma, que será obligatoria dentro de un año en todas las grandes industrias cárnicas de España y que «respetará en todo momento la intimidad de los trabajadores», según indica el texto publicado ayer en el Boletín Oficial del Estado.
En el pequeño matadero de Matosa, en Totana, Patricio Acosta valora que se trata de «una cuestión de bienestar, tanto para los animales como para el consumidor» y que seguirán invirtiendo en trabajar en las mejores condiciones, «como hemos hecho siempre», recalca al responder que no tienen cámaras, pero que las pondrán para cumplir la ley.
Una instalación cuyo coste puede rondar los 700 euros, si se trata de un sistema sencillo de cuatro cámaras, según estima la presidenta de la Asociación de Empresas de Seguridad de la Región, Encarna Ortiz.
«Nos parece bien que haya un sistema de grabación que acredite que hacemos correctamente nuestro trabajo. El bienestar animal es algo que ya aseguramos los veterinarios desde que se descarga en el matadero hasta que se sacrifica, pasando por todas las líneas de producción. Creo que es positivo de cara a la sociedad», asegura la presidenta del Colegio de Veterinarios de la Región de Murcia, Teresa López, que representa a unos 1.100 profesionales, sobre la nueva normativa aprobada por el Gobierno central que obligará a los mataderos a contar con un sistema de videovigilancia.
«No nos preocupa que nos graben porque los veterinarios hacemos bien nuestro trabajo y no nos interesa que los animales sufran, ni por humanidad ni por seguridad alimentaria, porque cuando es así la calidad de la carne disminuye», explica López.
Sobre las instalaciones que ya cuentan con esta herramienta de control en la comunidad autónoma, López afirma que «casi todos los mataderos grandes de la Región tienen cámaras instaladas. Son los pequeños los que tendrán que hacer la inversión y adaptarse a la nueva normativa en los próximos años».
«Multitud de controles»
La «formación continua» que reciben los empleados de los mataderos es otra de las cuestiones que resalta la presidenta de los veterinarios, poniendo el valor la profesionalidad del sector. Y destaca que existen «multitud de controles» en todo el proceso de sacrificio que garantizan la calidad. «Hay veterinarios contratados por los mataderos y otros que son inspectores de la Comunidad. Ya está todo controlado, la diferencia es que ahora nos grabarán», concluyó López.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Pillado en la A-1 drogado, con un arma y con más de 39.000 euros
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.