Empieza el baile para cortejar a la Croem

Los aspirantes necesitan reunir como mínimo 20 avales de cinco organizaciones empresariales distintas. El nombre de López Abad es el que más suena desde el primer momento, y cuenta con apoyos dentro de la confederación para dar este paso. José María Albarracín señaló desde el primer momento que prefiere un sucesor de consenso, y apuesta porque no sea necesario acudir a las urnas. Existe pues un trabajo interno con tal propósito, y para anudar el respaldo de las federaciones clave. No obstante, se quiere guardar las formas y los procedimientos para que el relevo no resulte un dedazo. Y en este sentido, recuerdan desde la patronal que cualquier empresario o empresaria puede optar a la presidencia, recabar avales e iniciar su campaña. Croem asesora a 40.000 empresas y cuenta con 70 federaciones y asociaciones, además de unas 130 empresas adheridas y colaboradoras.

Si se convierte en presidente de la patronal, López Abad señala que ejercerá el cargo con plena dedicación, dejando la Cámara de Comercio. Duda además de que ambos cargos sean compatibles. Esto abriría otro escenario en la institución cameral, donde los miembros que conforman los órganos directivos –son 36– tendrían que designar a un presidente o presidenta interino hasta que finalice oficialmente el actual mandato y se convoquen nuevas elecciones. En algunos foros suena el nombre de la empresaria Miriam Fuertes, que es actualmente vicepresidenta de la Cámara junto con Javier Yelo Huertas. El sustituto de López Abad podía ser uno de ellos, u otro miembro del sanedrín cameral. «Si llega el caso, hay que sentarse y hablar», apunta López Abad.