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La pedanía de Zarcilla de Ramos está a oscuras desde el pasado viernes, cuando robaron 5,7 kilómetros del cableado de la red de alumbrado público, cuya reposición costará cerca de 12.000 euros. La denuncia pública la realizó ayer el alcalde pedáneo, Miguel Quesada, que compareció junto a la concejal de Seguridad Ciudadana, María Belén Pérez Martínez, y otros homólogos de distintas zonas del municipio. Quesada habló de este robo que «ha dejado a oscuras Zarcilla de Ramos». De hecho, como reconoció la edil de Seguridad Ciudadana, a día de hoy, la entrada a la población continúa sin luz a la espera de que se reponga el cableado sustraído.
La inseguridad, reconoció Quesada, se ha incrementado considerablemente en los últimos meses. «Nos han robado incluso en la iglesia, que es lo más sagrado que tenemos. Pero también en viviendas, explotaciones agrarias y ganaderas. Incluso algún vecino se ha encontrado a los ladrones en su casa encapuchados», detalló. Y achacó lo que considera un «repunte» de la inseguridad a la reducción de efectivos en el cuartel de la Guardia Civil de Zarcilla de Ramos: «Solo hay un agente que se encarga de patrullar la zona y que abre el cuartel un único día a la semana».
La preocupación de los vecinos por el aumento de los robos llevó, explicó la edil de Seguridad Ciudadana, a incrementar la presencia de la Policía Local en esta y otras pedanías del norte. Aun así, considera que los efectivos son todavía «insuficientes», por lo que reclamó que se dote al puesto de la Guardia Civil de Zarcilla de Ramos de los «agentes necesarios» para cumplir con «suficiencia» las tareas de seguridad ciudadana y que «esté abierto y en servicio con carácter permanente las 24 horas del día durante todo el año».
Las actuaciones de la Policía Local han propiciado la detención de dos personas, la localización de objetos robados y la identificación de cinco miembros de un grupo delictivo organizado de origen rumano y con antecedentes policiales. En otras pedanías se han creado grupos de WhatsApp en los que están integrados vecinos y mandos de las unidades especiales de la Policía Local.
De este sistema dio cuenta el pedáneo de La Escucha, José González, quien afirmó que «nos va bastante bien». Los vecinos alertan a los mandos de la Policía Local «cuando vemos algo extraño». Esto sucede, contó, sobre todo «en las noches de viernes y sábado», aunque reconoció que las cifras de robos «han disminuido» desde que se puso en marcha este sistema, que se está aplicando en otras zonas del municipio.
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