El parking disuasorio del camino Marín en Lorca estará terminado en septiembre

Las obras para la implantación de las zonas de bajas emisiones en Lorca avanzan con la construcción de un aparcamiento disuasorio para vehículos en una parcela municipal junto al camino Marín. Las obras están ejecutadas al 70% y está previsto que concluyan en septiembre, según dijo este lunes el alcalde, Fulgencio Gil, que supervisó el avance de los trabajos acompañado por las concejalas de Fomento y Urbanismo, Rosa Medina y María Hernández. El proyecto tiene un presupuesto de 2,3 millones de euros, financiados en su mayor parte con los fondos europeos Next Generation.

El aparcamiento tendrá una planta subterránea y otra en superficie con un total de 4.900 metros cuadrados y dispondrá de 176 plazas para coches de las que nueve estarán equipadas con cargadores eléctricos y ocho se reservarán para personas con movilidad reducida. También habrá 11 plazas para motos.

Las instalaciones auxiliares incluirán aseos, una cabina de control, una sala de mantenimiento, almacenes, ascensor y paneles fotovoltaicos para cumplir los criterios medioambientales.

El proyecto incluye la mejora de la urbanización de las calles adyacentes con la renovación del pavimento e iluminación y la creación de un nuevo vial en un solar contiguo. Según el alcalde, el nuevo parking permitirá la edificación sobre una parte de esta nueva infraestructura de futuras dependencias municipales.

Gil recordó que el aparcamiento se sitúa en un lugar estratégico, ya que se prevé su desarrollo urbanístico con la construcción en la misma manzana de 139 viviendas y 219 plazas de estacionamiento.

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