El municipio pide la eliminación de tres puntos negros para evitar inundaciones

Un paso bajo el ferrocarril en la pedanía de Almendricos, la mejora y reparación de las carreteras RM-11 (conocida como la autovía de Águilas-Lorca) y la RM-621 (antigua vía de conexión entre Águilas y Lorca) y las actuaciones necesarias para facilitar la evacuación de las aguas de la rambla de Biznaga por debajo de la RM-11 y la RM-621, con la ampliación de la zona de drenaje que eviten el desbordamiento de agua sobre la vía en el caso de fuertes lluvias, permitirían la eliminación de tres puntos negros para evitar inundaciones como la de 2012.

Las tres actuaciones han sido solicitadas por el Ayuntamiento para su inclusión en los presupuestos del próximo año de la Comunidad Autónoma, según explicaron ayer el alcalde, Francisco Jódar, y la concejal de Obras, Eulalia Ibarra. En el caso de las obras reclamadas en la pedanía de Almendricos, su consecución evitaría el corte del tráfico que se produce «durante los episodios de lluvias intensas», según aseguró Jódar.

En cuanto a las obras en Campillo, se pretende que las dos carreteras consideradas de alta intensidad de tráfico -la primera la utilizan 12.076 vehículos al día y la segunda 3.719- sean objeto de distintas actuaciones que permitan su operatividad como arterias de comunicación de las pedanías del sur del municipio en el caso de cualquier catástrofe. Y obras que permitan la evacuación de las aguas de la rambla de Biznaga por debajo de las dos vías, con la ampliación de la zona de drenaje que eviten el desbordamiento de agua sobre la carretera en el caso de fuertes lluvias.