Juzgarán a 4 jóvenes por la agresión a 'La Intocable' en La Boca del Lobo

Cuatro jóvenes se sentarán en el banquillo para responder por la brutal agresión que sufrió la joven, Lucía G. C., 'La Intocable', a las puertas del pub La Boca del lobo, en Murcia, en enero de 2017. La Audiencia Provincial ha confirmado recientemente el auto de transformación en procedimiento abreviado -equivalente al auto de procesamiento- dictado por el Juzgado de Instrucción número 2 de Murcia. La magistrada considera a Carlos V., Alejandro E., Ariadna S. e Irene J. como presuntos autores de un delito contra los derechos y libertades fundamentales, en concurso con otro delito de lesiones graves, con la agravante de disfraz y abuso de superioridad.

'La Intocable' fue sorprendida, el domingo 22 de enero de 2017, en torno a la una de la madrugada a las puertas del citado pub, en la zona de 'las tascas'. Según recoge la instructora en su auto, al que ha tenido acceso 'La Verdad', se encontraba fumando cuando se le acercó una de las acusadas, Ariadna S., que presuntamente fue quien inició la agresión golpeándola desde atrás con una patada y un puñetazo «sin mediar provocación alguna». Tal y como reconoce la juez, la atacante, que iba acompañada de un grupo de entre 10 y 12 personas, se enzarzó en una pelea con Lucía G. cayendo ambas al suelo. Ese momento, explica, fue aprovechado por otros dos acusados, Alejandro E. y Carlos V, para sumarse al ataque. La magistrada explica, en el auto, que estos dos jóvenes iban tapados con bragas y lucían una vestimenta que podría vincularse a una ideología radical. Además, podrían pertenecer al grupo ultra City Boys. Uno de los jóvenes reconoció, durante la instrucción, su radicalismo. «Soy antifascista porque mi abuela está enterrada en una cuneta», recalcó.

La instructora hace alusión al vídeo que se grabó de la agresión, y que se convirtió en prueba fundamental del caso, y remarca que estos dos acusados fueron reconocidos «sin género de dudas» por la propia víctima. Ambos presuntamente le propinaron patadas de forma continuada «cuando esta se encontraba en el suelo sin posibilidad de defensa, mostrando un especial ensañamiento y llegando, incluso, a pisar su cabeza en varias ocasiones al tiempo que le dijeron frases como 'cerda, puta, nazi de mierda'».

La magistrada aclara, en su auto, que 'La Intocable' llevaba un tatuaje visible en una de sus manos con una runa odal, símbolo del partido nacionalsocialista. Meses después, fue arrestada por la Policía como sospechosa de tomar parte en el ataque multitudinario en un bar de Churra del que fue víctima una familia entre cuyos miembros había una joven a la que los atacantes identificaron como 'sharpera' (radical de izquierdas).

Con esta resolución, el juzgado deja fuera del procedimiento a tres jóvenes que inicialmente fueron detenidos por la agresión -Roberto M., David V. y Kevin R.-, pero que el propio atestado policial acabó concluyendo que no se encontraban en el lugar. La Audiencia confirmó, recientemente, además la absolución de otro investigado, Eloi R., al que la propia afectada había reconocido como uno de los participantes y que fue inicialmente procesado. Sus letrados defensores, Eduardo Simó y Eduardo Avilés, del despacho Certerum Abogados, recurrieron la decisión alegando que el joven, en el momento de la agresión, se encontraba en su casa en Librilla. El tribunal acepta el argumento de la defensa y reconoce que, más allá de la declaración de 'La Intocable', «no existen ni siquiera indicios de que estuviera en el lugar de los hechos», ni aparece en el conocido vídeo.