Investigan una clínica de cirugía estética por cerrar y abandonar a los pacientes en Murcia

El Servicio de Inspección de Centros, Servicios y Establecimientos Sanitarios de la Comunidad Autónoma ha tomado ya cartas en el asunto y, además de abrir una investigación a nivel administrativo, ha informado a la Fiscalía de la Región de Murcia para que analice la eventual comisión de delitos. Estos podrían abarcar los ámbitos de la salud pública y económico, ya que los usuarios contrataron servicios que no están recibiendo. En algunos casos, financiaron tratamientos de hasta 6.000 euros con pagos a plazos.

«Con fecha 29 de abril, al conocerse el cierre de esta clínica, el Servicio de Inspección inició una actuación de oficio, cuya conclusión y recomendaciones han sido remitidas al Ministerio Fiscal», confirmaron ayer a LA VERDAD fuentes de la Consejería que dirige Juan José Pedreño. En la Administración regional evitaron concretar el número de afectados de los que ya tienen constancia a través de este expediente; si los perjuicios sobre los que se indaga abarcan cuestiones añadidas a la de los balones de silicona; y sus indicaciones a la Fiscalía.

En todo caso, fuentes conocedoras de la investigación señalaron que puede haber decenas de afectados. E indicaron que, al margen de las pesquisas de la Fiscalía, la clínica afronta posibles multas de la Comunidad relativas a la normativa que regula este tipo de establecimientos sanitarios.

La denuncia sobre la clausura de Doctor Life, que dispuso de instalaciones en la zona de la plaza Nueva de San Antón y en la calle Baños (cerca de la céntrica plaza Santa Isabel), llegó a la Consejería a través de la Asociación de Consumidores La Defensa. La abogada María José Hernández, que forma parte de esta entidad, precisó a este diario que «la Inspección certificó hace dos semanas que la clínica de Murcia está cerrada» y que los burofaxes enviados por los denunciantes a la central de Doctor Life, en Madrid, son devueltos.

Según Hernández, los pacientes, «mitad hombres y mitad mujeres de hasta 35 años», no reciben respuesta por teléfono ni en el correo electrónico que les indicó la franquicia. Este diario contactó por teléfono con la clínica de Madrid para conocer la versión de la compañía Vampire SLU, propietaria de Doctor Life, pero no la dio.

«Con nuestra asociación han contactado ya diez pacientes. Algunos llevaban dietas con un nutricionista y empezaron a no recibir sus notificaciones semanales para saber qué debían comer y a no poder solicitar revisiones», comentó Hernández. Y añadió: «A los médicos que colocaron los balones, la empresa les dijo que todos los pacientes serían avisados del cierre y tendrían asegurada la atención. Pero la realidad es que la clínica los ha dejado tirados y está poniendo en riesgo su salud».

La organización de consumidores Facua informó de que ha recibido «numerosas consultas de afectados de varias provincias que se han quedado con tratamientos sin finalizar, con citas pospuestas de forma indefinida y con el cierre de los centros de Doctor Life».