Funcionarios de Justicia de la Región de Murcia amenazan con protestas tras la huelga de los letrados

«Los trabajadores están cabreados al sentirse excluidos de la negociación, que ha dejado fuera a más de un 80% de la plantilla», asegura Flora Martínez, secretaria regional del Sector de la Administración de Justicia de CC OO, antes de reunirse en una asamblea con empleados del sector de Molina de Segura. El sindicato anunció ayer que promoverá movilizaciones para reclamar las mismas mejoras laborales a todos los profesionales. Martínez desveló que tendrá lugar hoy en Madrid una reunión con las demás fuerzas sindicales para abordar una posible huelga.

«Están alterados; no ven con buenos ojos la subida», indicó Rafael Romero, presidente de la gestora del sector de Justicia del CSIF de la Comunidad. «Se han saltado además la negociación colectiva de los sindicatos», prosigue Romero, que advierte que su organización no descarta «medidas de presión» si el Ministerio no reúne de manera inmediata la mesa de negociación. Incluso, revela que los jueces y fiscales también están analizando el aumento salarial. «El propio Ministerio ha reconocido que cualquier modificación al alza de las retribuciones de un cuerpo tiene repercusiones en el resto de carreras de forma que cualquier cambio que se plantee tiene impacto colateral y en cascada sobre las cuantías que recibe el resto del personal», apunta Romero. Tampoco está de acuerdo UGT al entender que, «si hay dinero para aplicar esta subida, también debe haber para aplicarla a los demás funcionarios», explica el secretario del sector AJE de la fuerza sindical de la Región, aunque señaló que, pese a que su postura es contraria, no se ha planteado todavía ninguna movilización en estos momentos. Sin embargo, no desecha la posibilidad de convocar una huelga.

Al sindicato Staj le parece injusto que el Ministerio haya negociado con un sector profesional de Justicia y haya apartado de la negociación colectiva a los demás. «Nos sentimos humillados; se nos ha ninguneado», afirma Julio Andrés Carrasco, delegado sindical de Staj y funcionario del cuerpo de gestión. «Los que llevamos la carga de trabajo somos los funcionarios y, además, no se nos reconoce nunca nuestra labor», insiste este representante. Carrasco indica que los trabajadores están «desanimados» y «descontentos» y que «el sentir general es movilizarse e ir a la huelga». «Todos los funcionarios tenemos dos pantallas, el expediente en papel no ha desaparecido, seguimos trabajando en ambos sentidos, en papel y en el ordenador, tenemos que repetir muchas tareas porque los sistemas informáticos no funcionan correctamente, entre otras cosas» lamenta.

Los sindicatos coinciden en que se revisen en profundidad las tareas reales que acometen los funcionarios y se aborde la negociación de la carrera profesional, así como el abono de productividad. «Debemos negociar también los planes de actuación por el atraso provocado por el boicot al trabajo de los funcionarios durante la huelga, a quienes se les ha impedido realizar con normalidad sus funciones», zanja Carrasco.