Cs exige el cese de Padín para seguir en el pacto de Cartagena

La alcaldesa aseguró ayer que no tiene «absolutamente» ninguna duda de la «lealtad» de los dos ediles y de que continuarán toda la legislatura. «En las últimas 24 horas he despachado con Amoraga y con Padín y no estoy nada intranquila, porque aquí confiamos los unos en los otros al cien por cien», añadió. El equipo de gobierno tiene mayoría absoluta, al sumar seis ediles no adscritos (expulsados del PSOE), siete del PP y dos de Ciudadanos. Según la regidora, también está garantizado el relevo en la alcaldía en junio, que permitirá a la vicealcaldesa, Noelia Arroyo (PP), gobernar hasta las elecciones de 2023.

Padín fue expedientado por afirmar que seguirá en la coalición, diga lo que diga su partido, y por sus críticas a las cúpulas regional y nacional de Cs tras la moción de censura al Gobierno regional. Ayer contestó al expediente con una alegación en la que subraya que un partido de centro y liberal debe tolerar la crítica en lugar de censurarla y reafirmarse en que mantendrá la palabra dada a un gobierno estable.

Amoraga dijo que mantiene la disciplina y espera a los posibles movimientos de su partido. Y Ana Martínez Vidal no ha cuestionado públicamente por ahora el acuerdo municipal de Cartagena.

El Comité Autonómico de Ciudadanos en la Región anunció ayer la presentación de mociones en todos los ayuntamientos en los que tiene representación en la Comunidad para «exigir a los tránsfugas que renuncien a los cargos y prebendas obtenidos, así como a las actas o escaños logrados en representación de una formación política a la que ya no pertenecen», según explicó Martínez Vidal. Un portavoz de la formación subrayó que se refiere a los concejales de su propio partido que desobedezcan sus órdenes y mantengan pactos que desaprueba.

Martínez Vidal trasladará al ámbito municipal su negativa a «reconocer como gobierno legítimo al Ejecutivo regional de PP y tránsfugas, un gobierno corrupto».