El PP gobernará con mayoría simple y sujeto a pactos

Se cumplió el guión previsto y el popular Jesús Molina Izquierdo gobernará el municipio durante otros cuatro años, pero, eso sí, con mayoría simple por ser la lista más votada (2.475 votos) y sujeto a pactos o acuerdos puntuales con otras fuerzas políticas. Se vislumbran cuatro años de plenos trepidantes y muy reñidos.

El acto de investidura reunió en el Teatro Cervantes a unos 150 vecinos, menos que en otras ocasiones. Tras constituirse la mesa formada por el de más edad, Jesús Molina, y la más joven, Alba Gómez, los 17 concejales fueron depositando en una urna sus sobres, cuyos nombres fue leyendo el propio Molina.

Tras una semana de reuniones y negociaciones con reproches mutuos, sobre todo entre PSOE e IU, donde esta última formación era partidaria de formar gobierno con Ciudadanos y PSOE, mientras que el candidato socialista, Antonio Moreno, explicó que «Ciudadanos y UYD no han querido pactar», los cinco candidatos se votaron a sí mismos y fue proclamado alcalde Jesús Molina Izquierdo. Éste felicitó a todos los candidatos, especialmente a Ciudadanos y UYD, los únicos con los que mantuvo conversaciones.

La nueva corporación tiene ocho caras nuevas con respecto a la legislatura pasada: Alba Gómez, Joaquín Gamboa y Estíbaliz Bernal, por el PP; Antonio Moreno, Nefertari Gómez e Isabel Pérez, por el PSOE; y Jesús Manuel Carrillo y Felipe José García, yerno del alcalde, por IU-Los Verdes. Así las cosas, el PP se queda con 7 concejales; el PSOE con 5; IU con 3; UYD con 1; y Ciudadanos con 1.

Ya en su discurso de investidura, Molina pidió «el apoyo de los 17 concejales para que proyectos que vayan transformando Abarán en el camino hacia el progreso salgan adelante, y no tengo la menor duda de que esa cooperación será unánime». Aseguró que «ninguno somos los poseedores de la verdad absoluta, pero sí somos portadores de una ínfima parte de ese gran puzle en donde se encuentra, podremos contemplarla y seguirla para que en vez de crispación haya concordia; en vez de violencia, cordialidad, respeto, solidaridad y honradez», concluyó, no sin antes ponerse «a disposición de todos los abaraneros».