Ni consejera, ni presidenta

Patricia Fernández será la alcaldesa de Archena los próximos cuatro años. Parece una afirmación gratuita, después de que la candidata del Partido Popular revalidara el domingo la mayoría absoluta al lograr 4.541 votos (el 50,4% del total, el mayor porcentaje de entre los municipios con un cierto peso demográfico) y 9 de los 17 ediles de la corporación. Pero su nombre fue uno de los que llegó a sonar como posible recambio para Alberto Garre en la presidencia de la Comunidad Autónoma y está en las quinielas para entrar en un futuro ejecutivo regional presidido por Pedro Antonio Sánchez. La alcaldesa, sin embargo, lo dejó ayer claro: «Ni consejera, ni presidenta».

Lo hizo en el que fue su primer día de relativo descanso después de la campaña y la larga noche electoral: «Agotaré la legislatura en Archena, porque ese es mi compromiso con los archeneros. Hoy no me planteo nada más». La alcaldesa compaginará su labor en el Consistorio con su recién estrenado cargo de diputada regional, logrado por la tercera circunscripción. La alcaldesa ocupaba el octavo lugar en la lista, que finalmente colocó en el Parlamento regional a diez populares.

Fernández habló con Pedro Antonio Sánchez brevemente la noche del pasado domingo para felicitarle por el resultado electoral. Admite que tiene pendiente un encuentro con él, pero niega que haya habido un contacto para tantearla de cara a entrar en el Ejecutivo regional: «Esa llamada ni se ha producido ni se va a producir».

La regidora no cree que el hecho de ser uno de los siete candidatos del PP cuya elección -mayoría absoluta mediante- es segura el próximo 13 de junio le haya servido para reforzar su posición dentro del Partido Popular. «Yo me siento reforzada en mi municipio, porque mi ilusión era trabajar cuatro años más por Archena», asegura.

«Hay que reflexionar»

«Aportaré mi granito de arena con este resultado», explica, mientras califica de «muy buenos» los cosechados a nivel regional por el partido. Lo hace porque considera que el PP «remontó» los vaticinios de las últimas encuestas, que le daban incluso peores números. «A pesar de los muchos problemas habidos y la difícil situación económica, los murcianos nos prefieren al Partido Popular, aunque sea con mayoría simple».

Eso sí, Fernández reconoce que los resultados «nos deben hacer reflexionar para intentar mejorar de cara a otros comicios, los primeros, los de noviembre». Volviendo a nivel local, Fernández tiene prevista una reordenación de las concejalías que incluye la creación de una específica para el programa europeo Archena Smart, la estrella de una legislatura en la que quiere «reducir deuda y bajar impuestos para fomentar la creación de empleo». En infraestructuras, su demanda es la sustitución del puente de hierro.

Pese a contar con mayoría absoluta, Fernández tiene previsto abrir el diálogo con la oposición «siempre que la confrontación política no llegue a lo personal».

«Pedro Antonio me va a tener a su lado para sacar adelante su proyecto de Región, no me planteo otra cosa. Acabo de ganar unas elecciones y mi ilusión es seguir en Archena», sentencia. Eso sí, tampoco se cierra a priori ninguna puerta, y pese a reiterar que agotará la legislatura, se despide con un «luego, ya veremos».