La presión social tumba el nuevo vial que atravesaba la huerta de Guadalupe

Las movilizaciones de una decena de colectivos han llevado al equipo de gobierno municipal a replantearse la construcción de un vial que iba a atravesar una zona de huerta entre Guadalupe y Rincón de Beniscornia. El proyecto, que quedaría aparcado, dibujaba un eje de 750 metros de longitud –entre la avenida de los Jerónimos y la carretera de La Ñora– que permitía a los vehículos circular a una velocidad de hasta 80 kilómetros por hora por mitad de unos terrenos de singular interés ambiental.

A finales del pasado mes de agosto, el anuncio de las obras del vial GH-01 por parte del concejal de Fomento y Contratación, Mario Gómez, de Ciudadanos, desató las protestas de asociaciones vecinales y conservacionistas por el impacto que, a su juicio, iba suponer en el entorno. En una carta dirigida en septiembre al alcalde de Murcia, el socialista José Antonio Serrano, ocho colectivos cargaban contra esta infraestructura que consideran «innecesaria». Argumentaban que promovía «la destrucción de un suelo fértil con altos valores paisajísticos, ambientales y agroecológicos». Y avisaban de su proximidad al Bien de Interés Cultural (BIC) del monasterio de los Jerónimos, sede del campus de la Universidad Católica (UCAM), y que, además, suponía «la pérdida de caminos e itinerarios históricos y la sección de acequias centenarias y sus quijeros, con la biodiversidad que albergan». En la misma misiva remarcaban que la futura carretera estaba «totalmente desfasada en su planificación» y que no existía «demanda social ni necesidad en cuanto a movilidad».

Pese a que ese escrito todavía no ha tenido una respuesta oficial, las fuentes consultadas por LA VERDAD confirmaron que el primer edil ya ha comentado en varios encuentros su oposición al proyecto y que, por tanto, su intención es que no se lleve a cabo. Probablemente así se lo comunicará a representantes de estas ocho asociaciones en una reunión que aún no tiene fecha. José Antonio Serrano considera que ese vial va en contra de una de las señas de identidad de Murcia, como es su huerta, según habría comentado a personas de su equipo más cercano.

En su día, el concejal Gómez defendió la futura carretera porque mejoraría «la calidad de vida de los más de 12.000 vecinos que residen en esta zona». Y explicó que el proyecto sería respetuoso con los cauces de riego.

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