Cinco de los veinte heridos en el vuelco del autobús en Murcia continúan hospitalizados

Cinco de los veinte heridos en el accidente que se produjo este martes en la autovía A-7, a su paso por Murcia, a raíz del vuelco de un autobús continúan hospitalizados. Según informaron fuentes de la Consejería de Salud, tres de ellos se encuentra en el hospital Virgen de La Arrixaca y otros dos en el Morales Meseguer, en Murcia.

Uno de los lesionados se encuentra en el área de reanimación del hospital Virgen de La Arrixaca después de que tuviera que ser sometido a una intervención. En ese mismo centro permanecen en planta otros dos afectados por el siniestro, que afectó a un grupo de mayores que viajaban de Valencia a la localidad almeriense de Roquetas de Mar. El hospital Morales Meseguer atiende además en su Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) a uno de los heridos más grave, y otro permanece en planta de este mismo centro.

El siniestro, que dejó una veintena de heridos -cinco de ellos de carácter gravedad-, provocó además el cierre durante una hora de la circulación -en sentido a Alicante- de esta vía, una de las principales arterias de la Región, lo que conllevó el colapso del tráfico en gran parte de la capital.

El accidente se produjo, pasado el mediodía, en la autovía A-7, a su paso por Murcia, antes de la salida de Cabezo de Torres -cerca del estadio de Nueva Condomina-, tal y como confirmaron fuentes de Emergencias. Por causas que aún se investigan, el conductor del autobús, que discurría en dirección a Almería, perdió de repente el control del vehículo y acabó atravesando la mediana. El autobús quedó tendido sobre la calzada y bloqueando, debido a su tamaño, los dos carriles destinados a la circulación en sentido Alicante. El 112 recibió las llamadas de numerosos testigos que alertaron del impactante siniestro.

El accidente, ocurrido concretamente en el punto kilométrico 563 de la autovía A-7, generó además un importante bloqueo del tráfico en la zona. La autovía quedó cortada al tráfico en sentido a Alicante durante alrededor de una hora y generó un nivel de circulación negro -tráfico interrumpido- ocasionando hasta cuatro kilómetros de retenciones en la autovía A-7, tal y como especificaron fuentes de la Dirección General de Tráfico (DGT). El atasco, además, se extendió a las vías de acceso a la autovía y a algunas zonas cercanas en las que, durante varias horas, la circulación se volvió complicada.

Posteriormente, la Guardia Civil y los efectivos de Emergencias consiguieron retirar el vehículo en un carril para permitir el paso progresivo del tráfico. En las labores de rescate participaron cuatro vehículos de bomberos de los parques de Espinardo y del Infante de Murcia. En torno a las 17 horas, la circulación ya se había logrado restablecer y el tráfico había recuperado toda la fluidez, según explicaron las fuentes.

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