El acceso a Espinardo desde la autovía A-30 y la plaza Díez de Revenga, puntos negros a los que el Ayuntamiento de Murcia busca soluciones

La entrada a Murcia desde la autovía A-30 por Espinardo -por la avenida Doctor Pedro Guillén- y el acceso a la zona más comercial desde la plaza Díez de Revenga. Son los dos puntos críticos para el tráfico detectados al Ayuntamiento de Murcia y a los que este, en concurso con otras administraciones, está buscando solución. De hecho, precisan desde el Consistorio que el tramo entre la llamada Ronda Oeste y la rotonda de la avenida Ciclista Mariano Rojas es de competencia estatal, por lo que están colaborando con la Demarcación de Carreteras en la búsqueda de posibles soluciones que faciliten la evacuación de vehículos desde una saturada A-30.

De hecho, no es extraño encontrar en horas punta colas de vehículos atascados en la autovía en su intento de tomar la salida denominada 'Murcia (Norte) por avenida Juan Carlos I', dada la acumulación de coches que se produce en la citada rotonda, -la que también da acceso al restaurante McDonald's de la zona- y que se ve alimentada, además, por todos aquellos conductores que cruzan el puente para llegar a la ciudad desde pedanías del oeste, como La Albatalía. Por ello, el concejal de Movilidad, Gestión Económica y Contratación, José Francisco Muñoz, señaló este miércoles que, en este caso, las posibles medidas deben venir del Ministerio de Transportes.

«Agradecemos que la administración central haya tomado conciencia de esta situación y nos haya hecho una solicitud para trabajar en este sentido, por los que realizaremos mediciones para buscar alternativas, aunque será esta la que deba ponerlas en marcha; nosotros, en nuestro ámbito territorial y competencia estamos haciendo nuestro trabajo y cada responsabilidad la debe ejercer aquel al que le corresponde», precisó Muñoz, instando a la ejecución de otros proyectos que ayuden a descargar de tráfico la Ronda Oeste, como los arcos Norte y Noroeste o que mejoren la fluidez como el tercer carril de la A-7. De hecho, destacó los problemas de circulación registrados este miércoles en diversas vías, que han llevado a vecinos de Molina a soportar, en su camino a Murcia, un embotellamiento de cerca de dos horas. También instó a la adopción de mejoras en el servicio de Cercanías.

Sí reconoció como competencia municipal la posible reordenación del acceso al entorno de la avenida de la Libertad y la plaza Condestable desde Ronda Norte, el cual se ha complicado tras la nueva configuración que adquirieron las vías del entorno con la ejecución de las obras de la nueva red de carriles bus y bici y que eliminaron la entrada directa existente. Para adoptar estas posibles medidas, el Consistorio murciano quiere apoyarse en los datos y mediciones que le aporta la puesta en marcha de los contratos de tecnificación del tráfico, que llevan desarrollándose desde hace meses y que llegan financiados gracias a fondos europeos Next Generation.

Estos proyectos de coste millonario han permitido llenar la ciudad de cámaras inteligentes y sensores, entre otros recursos, capaces de recopilar datos sobre el estado y fluidez de la circulación, los cuales son procesados posteriormente mediante sistema de inteligencia artificial por el Servicio Municipal y de Ingeniería de Tráfico. Estas herramientas se verán enriquecidas próximamente con el uso de datos aportados por Google Traffic y con una aplicación móvil llamada EMA, la cual se incorporará a diversos vehículos de la flota municipal que realizarán rutas predeterminadas, registrando incidencias que permitan modelizar problemas recurrentes en determinadas vías.

En principio, aunque no de manera restrictiva, serán ocho vehículos de Aparcamurcia, dependiente de Urbamusa, los que se encarguen de recopilar estos datos, pudiendo hacer regulaciones semafóricas más adecuadas, evitando ocupaciones de vía -por mudanzas u obras de distinta índole- o el cambio se sentidos de circulación de determinadas calles. De hecho, reconocen desde el Consistorio que esta posibilidad se encuentra encima de la mesa en determinados puntos, incluso en algunos de aquellos en los que ya se ha actuado con resultados «positivos» -»mejorando la fluidez y los tiempos de viajes»-, como la calle Floridablanca, el cruce del Rollo, Ciudad de Almería, Pintor Pedro Flores, Plano de San Francisco o Teniente Flomesta, donde se suprimieron varios tramos de carril bus y bici.

Hizo Muñoz así balance de las medidas que se han ido adoptando en en los últimos meses por el citado Departamento de Ingeniería del Tráfico, del que ha partido la aplicación de 1.500 decisiones, medidas y cambios concretos por semana que han tenido su reflejo en la circulación urbana. De hecho, como muestra, señaló Muñoz que las incidencias en puntos como la calle Floridablanca se han reducido hasta un 70%, pasando de las 52 registradas en diciembre a las 16 de febrero. Destacó, además, que el tiempo que se emplea en recorrer el tramo entre la plaza de la Cruz Roja y Martínez Tornel ha pasado de unos 9 minutos a poco más de dos y que el transporte público lo hace en un minuto con cuarenta segundos.

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