
Secciones
Servicios
Destacamos
LA VERDAD
Viernes, 14 de marzo 2025, 10:49
Un grupo delictivo que dirigía un activo punto de venta de cocaína y hachís, ubicado en el casco urbano de Cieza, fue desarticulado por la Guardia Civil de la Región de Murcia. Esta actuación se enmarca dentro de la operación 'Chasles', iniciada para prevenir y perseguir el tráfico de drogas. Además, los cuatro integrantes de la banda fueron detenidos como los presuntos autores de un delito contra la salud pública y de un delito de defraudación de fluido eléctrico.
Las actuaciones se iniciaron el pasado año, cuando efectivos de Prevención de Seguridad Ciudadana de la Benemérita abrieron la operación para verificar una serie de indicios sobre la existencia de un punto de venta de drogas 'al menudeo' habilitado en una vivienda del casco urbano ciezano.
Las primeras pesquisas permitieron a los investigadores ubicar un inmueble y verificar las sospechas. Los guardias civiles comprobaron entonces que la vivienda recibía un elevado número de visitas de personas, tanto a pie como en vehículo. Estas personas, tras permanecer apenas un minuto en la vivienda, la abandonaban.
En los dispositivos de vigilancia efectuados sobre la casa, los guardias civiles también comprobaron que el número de visitas se incrementaba conforme avanzaba el día, siendo el horario vespertino y nocturno y, sobre todo, los días previos al fin de semana donde más visitas recibían. También se constató que entre los supuestos compradores se encontraban numerosos consumidores habituales de Cieza y de municipios limítrofes.
La Benemérita continuó con la investigación hasta que identificó a las personas que regentaban el punto de venta. Los sospechosos eran cuatro integrantes de un clan familiar con antecedentes por delitos similares, que distribuían principalmente cocaína y hachís.
Una vez obtenidos todos los indicios necesarios, la Guardia Civil localizó y detuvo a los cuatro sospechosos, como presuntos autores de un delito contra la salud pública, por tráfico de drogas, y de un delito de defraudación de fluido eléctrico, tras detectar una conexión ilícita a la red eléctrica en la vivienda utilizada.
En el registro efectuado en la casa, los guardias civiles se encontraron con una mesa de 'trabajo', en la que se halló más de un centenar de dosis de cocaína y cerca de 100 gramos de hachís, junto con utensilios de corte, balanzas de precisión, alambre y bolsas de plástico con recortes circulares que utilizaban como envoltorio para las dosis, que fueron incautados.
También se hallaron 700 comprimidos de clonazepam de alta concentración, una benzodiacepina usada como antiepiléptico, que también se suele utilizar ilícitamente para la elaboración del 'karkubi', un tipo de droga de apariencia similar al hachís, pero con inferior valor en el mercado.
Durante el registro, los guardias civiles también incautaron 2.000 euros, medio centenar de cartuchos del calibre 12 milímetros y un turismo utilizado durante el desarrollo de la actividad delictiva ahora esclarecida, entre otros efectos.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.