«Al centro de Cartagena vienen de paseo y terraceo; por eso cierro y monto un bar»

A Irene Gavilá no le salían las cuentas en su tienda de la calle Puerta de Murcia de Cartagena desde hace varios años y hace un mes cerró, como lo ha hecho en la última década y media ocho de cada diez pequeñas y medianas tiendas de la ciudad portuaria, según los datos aportados por la Cámara de Comercio de Cartagena.

La zona más afectada por la oleada de cierre es el casco antiguo, donde la hostelería ha copado la mayoría de las calles y plazas. «Al centro histórico la gente solo viene de paseo y de terraceo. Ya no vienen de compras. Para eso tienen el centro comercial Espacio Mediterráneo. Por eso cierro mi tienda y monto un bar, que es lo que más tirón tiene en esta calle», explica Gavilá a LA VERDAD.

Esta comerciante montó su negocio de ropa hace más de diecisiete años y, tras pasar diferentes crisis, como dice esta empresaria, ahora es cuando se ha dado cuenta de que es mejor dar un paso atrás y buscar beneficios a través de otras ideas. Por eso, en el local donde tenía su tienda ya está realizando las reformas necesarias para, antes de que comience la Semana Santa en Cartagena, pueda abrir su bar.

«Del casco antiguo cartagenero se han ido todas las franquicias de ropa y eso lo hemos notado todos. Ahora la gente aquí no viene y con los turistas que llegan en cruceros no da para mantenernos», aclara.

Desde la asociación Centro Comercial Abierto, el tesorero, Joaquín Moya, detalla que los múltiples cierres de los últimos años se deben a las multinacionales, que solo venden 'online', y a la falta de regulación en el sector.

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