El deterioro del polígono Los Camachos de Cartagena desata el enfado de los empresarios

Matorrales que invaden la calzada, medianas y rotondas llenas de malas hierbas y descuidadas, bordillos rotos, asfalto resquebrajado, parcelas vacías con escombros y restos de maderas y señalización horizontal con falta de ser repintada, entre otros desperfectos. Este es el aspecto que presenta el polígono industrial Los Camachos. La falta de liquidez en la Entidad de Conservación ha llevado a este colectivo de empresarios a prescindir de servicios y dejar de hacer arreglos. Con las cuotas de los pocos industriales instalados allí y con la aportación de la Entidad Estatal del Suelo (Sepes), no les da para cubrir todos los gastos.

Sus problemas de financiación comenzaron hace cinco años. En 2019, cuando ya no aguantaban más, pidieron ayuda al Ayuntamiento de Cartagena, que les garantizó una cuota anual de 50.000 euros. Pero del pasado año solo han recibido la mitad de ese dinero y del correspondiente a este, nada. «Así es imposible. Ya no aguantamos más. Las quejas de los empresarios son constantes. Confío en el Consistorio, porque nos prometieron que el dinero llegaría», afirmó el presidente de la Asociación de Empresarios de Los Camachos, Antonio Bentancor.

Con el último arreón del año pasado y con el de este, en la segunda fase ya se ha sobrepasado con creces la mitad de las 130 parcelas comercializadas. En la primera, los terrenos que se urbanizaron en 2004 están casi todos vendidos, a excepción de unos pocos. Pese a ello, al ser un polígono tan grande «es imposible asumir todos los gastos sin ayuda de la administración local, a quién, por cierto, solo con nuestros impuestos al año pagamos más de un millón de euros», aseguró Betancor.

Si para algo no falta es para pagar a la empresa de seguridad que se encarga de vigilar la zona. Quieren evitar que ocurra como a principios de la década pasada, cuando los ladrones entraban a las pocas naves que estaban instaladas de manera asidua. Desde que pusieron cámara de videovigilancia los robos cesaron, aunque no del todo. A principios del mes pasado hubo dos.

«Estamos con el agua al cuello. Si no nos llegan, al menos, los 25.000 euros del año pasado y los 50.000 de este, entraremos en números rojos», avisó el presidente de los empresarios. Los industriales están también a la espera de que el Ayuntamiento cumpla su compromiso de instalar en el antiguo edificio de Contentpolis (el primer inmueble del fallido proyecto de la Ciudad de los Contenidos Digitales de la Comunidad Autónoma) la sede de la asociación empresarial y un vivero para nuevos negocios.