Cuenta atrás para adecentar el centro de Cartagena

En este estado se encuentra por ejemplo el solar situado entre las calles Don Roque y Ciprés; los de Cuatro Santos; y los de la Morería Baja, cuyos matorrales llegan a la altura de la rodilla. O el de la calle San Francisco, que pese a estar ubicado en la parte trasera de la futura Casa Museo de Isaac Peral ofrece una visión bastante decadente.

Por el contrario, ya ha sido adecentado el que hace esquina entre calle del Duque y Caridad, donde el año pasado se instalaron unas lonas con imágenes de las procesiones cartageneras. Una solución parecida le dieron a otro en la calle Serreta, aunque los motivos marineros de sus lonas no impiden ver los escombros que se acumulan detrás.

La opinión general de los ciudadanos autóctonos es que la imagen que ofrece el casco histórico en vísperas de la Semana Santa no es la más adecuada, aunque valoran positivamente los esfuerzos que se están haciendo para revertir esta situación.

En este sentido, una vecina consultada en plena calle por este periódico consideró que es un avance que el pasado año se instalaran lonetas en algunos de los solares que se encuentran en pleno recorrido de las procesiones, pero recordó que otros siguen ofreciendo «una imagen lamentable» a los turistas. «Hace poco han venido unos amigos extranjeros y hay zonas que dan verdadera vergüenza. Estábamos tomando algo en la glorieta San Francisco y el estado de ruina que presenta el edificio del lateral es tremendo», manifestó.

Otra vecina del centro es conocedora de la iniciativa municipal para forzar a los propietarios a construir o vender para dicho propósito,. Afirmó que «si se empezara a expropiar, la medida sería mucho más efectiva y los dueños darían prioridad a ejecutar las obras».

Por su parte, una tercera visita propuso que se haga como en otros ayuntamientos, «como el de Granada que obliga a los dueños a adecentar estos espacios sin uso, instalar bancos e incluso fuentes, para que puedan ser utilizados como zonas de esparcimiento».

«Esto hay que arreglarlo. No se puede tener el centro de la ciudad hecho una ruina. Me parece muy bien que el Ayuntamiento expropie a los propietarios que están dejando que Cartagena esté en este estado», comentó Diego.

Otra opinión tiene Enrique, al que la medida del Consistorio cartagenero no le parece la más acertada. «Ni una cosa ni la otra. La ciudad no puede dar esta imagen, pero en lugar de expropiar lo que debería hacer el Ayuntamiento es incentivar la construcción. Ya sea con ayudas fiscales o quitando trabas burocráticas. Se deben conservar los restos arqueológicos, pero dando facilidades a quienes quieren construir».

En este sentido, Fulgencio Andreu comentó que «la expropiación es un proceso largo, lo que debería hacerse es, por lo menos, enviar notificaciones a los propietarios para exigir que se limpien y adecenten, que parece que están empezando a hacerlo. Animarles a edificarlos sería lo mejor y, me consta, que a algunos propietarios, como al del solar que hay frente al Tántalo, ya les han comunicado que muy pronto no se van a poder usar estos solares como aparcamiento».

La opinión de los turistas es más halagüeña, ya que destacan la importancia de tratar de conservar los frontales de edificios de estilo modernista, aunque valorarían la reconstrucción. Entre estos está Marine Scargill, procedente de Chicago, que ayer tomaba fotografías de algunas de las balconadas de madera y hierro forjado que salpican las fachadas de muchos inmuebles del centro.

«Algunas de estas fachadas son absolutamente preciosas y nos ha gustado mucho que quieran preservar estos elementos antiguos tan bonitos. Por supuesto, para que la imagen fuera perfecta deberían estar reconstruidos, pero creo que es una buena iniciativa», comentó. Scargill destacó el edificio de la Casa Salvador Clares, en la esquina de Cuatro Santos con la calle del Aire, construido por el arquitecto Mario Spottorno en el año 1907 y reformada hace unos años. «Aquí han hecho un gran trabajo».