El alcalde denuncia múltiples deficiencias en el Palacio de los Deportes de Cartagena

Se lo temía, pero este martes por la mañana lo comprobó con sus propios ojos 'in situ'. El alcalde de Cartagena, José López, en compañía de la vicealcaldesa, Ana Belén Castejón, visitó el Palacio de los Deportes con la sospecha de que las instalaciones iban a dejar mucho que desear, y así fue. Filtraciones de agua, obstáculos para la movilidad, parqué en nefastas condiciones, simples púas sosteniendo zonas de la cubierta... El rosario de defectos detectados por el regidor parecía no tener fin. Tanto es así que López anunció a los periodistas que lo acompañaron en esta inspección que el actual gobierno va a exigir responsabilidades al anterior equipo del PP, encabezado por Pilar Barreiro, y a los técnicos que accedieron a recepcionar las obras de una infraestructura que, a su juicio, presenta irregularidades de tal calibre que impiden abrirla al público.

El alcalde, de Movimiento Ciudadano, recordó que la construcción del Palacio de los Deportes lleva siete años de retraso sobre la fecha inicial prevista y que el coste del proyecto se ha disparado de 14 millones a 21,5.

López señaló, asimismo, que ha presentado un informe que detalla los defectos en el juzgado de Cartagena que se encarga del pleito entre la empresa constructora, la UTE formada por Dragados y Emurtel, y el Consistorio, para que lo tenga en cuenta. En dicho proceso la constructora reclama dinero por el retraso en el pago de las facturas y el Ayuntamiento pide, a su vez, una sanción por el retraso en la entrega de la obra. El regidor anunció también que tomará una decisión sobre la puesta en marcha de las instalaciones tras una auditoría que valore cuánto cuesta arreglar los desperfectos. No obstante, advirtió de que esto no es una prioridad, «porque hay muchas necesidades en Cartagena».

Responsabilidad de los técnicos

El portavoz municipal del PP y exconcejal de Urbanismo e Infraestructura, Francisco Espejo, subrayó que fueron los técnicos responsables del control de la obra los que «aceptaron todas las certificaciones hasta la finalización de la obra» y también la «recepción» del edificio. El anterior gobierno «aceptó ese dictamen» con la confianza en los funcionarios «que son los profesionales, los arquitectos.; nosotros no lo somos», añadió.