La Asociación contra el Cáncer dejará este año de realizar el cribado de mama

A finales de 2023, la Aecc fue dejando de cubrir el plan de prevención del cáncer de mama en algunas áreas. En Molina de Segura, Lorca, Puerto Lumbreras y Alcantarilla las pruebas han pasado a realizarse en hospitales y clínicas concertadas, como ya ocurría en Cartagena y Mar Menor. En Cieza, las mamografías se llevan a cabo en el hospital Lorenzo Guirao. Pero la Asociación Española contra el Cáncer sigue asumiendo a día de hoy el cribado en el resto de la Región mediante dos unidades móviles y también en su sede de Murcia. Son estas pruebas las que tendrán que ser afrontadas por otras entidades o centros que aún están por determinar.

La decisión de abandonar el cribado parte de la propia asociación. «Dejar de realizar las mamografías viene establecido en nuestro Plan Estratégico desde el año 2006. En el siglo XXI, no es misión de una ONG llevar a cabo procesos asistenciales sanitarios, como la detección precoz del cáncer de mama. Ninguna otra organización de Europa lo hace», recuerda la entidad. El papel de la asociación debe ser otro: el apoyo psicosocial, la prevención, los cuidados paliativos, el voluntariado hospitalario o el fomento de la investigación. Miles de pacientes se benefician en la Región de estos programas imprescindibles.

La asociación fue abandonando el cribado de cáncer de mama en todas las comunidades en las que había asumido estas pruebas «de manera ordenada y siempre en función de las necesidades y características» de cada territorio. La Región de Murcia es la única comunidad en la que se mantenía un modelo que nació hace 30 años.

La Aecc comenzó a realizar el cribado, mediante contrato público, en 1994. Desde entonces, más de 900.000 mujeres han sido atendidas en la Región de Murcia. El programa se ha consolidado en estos años, con una gran aceptación. En el bienio 2021-2022 participaron 128.791 mujeres. Se detectaron 18 cánceres en la unidad de cribado de Cieza, 69 en Cartagena y Mar Menor, 173 en Murcia y 161 en las unidades móviles. En total, se diagnosticaron de manera precoz 421 casos.

El cambio que supondrá la salida de la Aecc del programa preventivo coincide con la extensión de las pruebas a nuevas franjas de edad. La Consejería de Salud quiere implantar el cribado desde los 45 a los 74 años, siguiendo las recomendaciones del Plan Europeo Contra el Cáncer 2021-2030. De momento, se ha iniciado la ampliación a las mujeres de 47, 48, 49 y 70 años. Con este objetivo, a finales de 2023 se convocó un concurso para la adjudicación de esta carga adicional de mamografías a diversas empresas y centros concertados.

Así, IDCQ Hospitales se ha hecho con las pruebas en Alcantarilla y Murcia Oeste hasta octubre de este año por 523.750 euros. En el área II de salud (Cartagena), la adjudicataria es el Hospital Perpetuo Socorro (439.950 euros). En el Mar Menor, el servicio ha recaído en Scanner Murcia (188.550 euros). Terapias Médicas Domiciliarias asume las pruebas en Molina de Segura (439.950 euros), y el Hospital Virgen del Alcázar, las mamografías de Lorca (otros 439.950 euros). Queda por resolver un lote clave: el correspondiente a Murcia este y sur.

La ampliación de las franjas de edad será paulatina. El objetivo es cubrir a todas las mujeres de entre 45 y 74 años de la Región de Murcia en 2025, señala la Consejería de Salud.

Los programas de cribado se han convertido en una herramienta clave, y no solo en mama. De acuerdo a la Estrategia en Cáncer del Sistema Nacional de Salud, las pruebas para la detección precoz del cáncer de colon (un test de sangre oculta en heces) deben llegar en 2024 a toda la población de entre 50 y 69 años. En la Región de Murcia, aún quedan dos áreas de salud pendientes de alcanzar este objetivo. En Cartagena, la franja se sitúa de momento entre los 57 y los 69 años, mientras en Lorca se ha comenzado a ampliar una horquilla que hasta ahora se limitaba a la población de entre 64 y 69. El principal obstáculo reside en las dificultades de los hospitales para asumir las colonoscopias que hay que realizar a quienes dan positivo en los test.

Otro reto es aumentar la tasa de respuesta a las invitaciones que se envían a los potenciales beneficiarios del programa, y que de momento se sitúa por debajo del 50%. Salud puso en marcha este verano una nueva estrategia que está dando buenos resultados, destaca Olga Monteagudo, jefa del servicio de Promoción y Educación para la Salud de la Consejería. Así, se han instalado buzones en todos los centros de salud para la recogida, sin cita previa, de las muestras. La participación ha aumentado un 15,3% gracias a esta iniciativa.