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Un momento de la suelta de la mussona, ayer, en el Carnaval de Águilas.

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Un momento de la suelta de la mussona, ayer, en el Carnaval de Águilas. Jaime Insa/ AGM

La Mussona de Águilas se convierte en morena como «guiño al Mediterráneo»

La suelta de la figura más ancestral y enigmática del Carnaval marca el inicio de los días fuertes de la fiesta, de Interés Turístico Internacional

Viernes, 9 de febrero 2024, 00:53

La suelta de la Mussona marca el inicio del estallido de la alegría desmesurada en Águilas. Es la antesala de los días más divertidos y coloridos que se viven en la ciudad, aunque la liberación de esta bestia autóctona tenga un punto tenebroso y un tanto oscuro, ya que se trata del personaje más ancestral y enigmático del Carnaval, fiesta de Interés Turístico Internacional que atrae a miles de visitantes cada año.

La figura, mitad humana y mitad animal, cuenta con tintes civilizados, pero predomina claramente el componente salvaje. Representa la dualidad de los seres humanos a través de una fiera, que este año encarna Mar Muñoz, de La Clanka y la peña de la noche La Ruina. Una «carnavalera de nacimiento», ya que su llegada al mundo coincidió con la fiesta –un 1 de marzo de hace 26 años–, que soñaba desde muy cría en convertirse en Mussona.

Anoche, por fin, hizo realidad su gran ilusión al emprender el camino que la llevaría desde el Castillo hasta la plaza de España, asustando a su paso a todo el que se cruzaba en su camino. «Siempre me ha llamado mucho la atención este personaje porque es algo único en nuestro Carnaval», destaca la protagonista al rememorar que en 2009 se recuperó el cargo en la categoría infantil y se presentó como candidata. Sin embargo, el azar no quiso que saliera elegida. «Lo echaron a suertes y salió el niño que se presentó conmigo. Yo fui su domadora».

Mar Muñoz, de La Clanka, usó raíces de posidonia, lapas, pinzas de cangrejo, esparto y cáscaras de naranja para su disfraz

Quince años después, Mar ha logrado hacer realidad el propósito que siempre ha tenido en sus pensamientos y que llevaba consigo como «una espina clavada» que salió de su corazón en el momento en el que apareció, desde las mazmorras del Castillo de San Juan de las Águilas, convertida en bestia. Para la esperada ocasión, la protagonista de la noche simuló ser una morena, un pez típico de la zona con la que hizo «un guiño al Mediterráneo» y que le recuerda a su abuelo paterno, Juan, recientemente fallecido y criado en las casas cueva de El Hornillo. Cuenta que de él le viene su vínculo con el mar y que su atuendo «es un homenaje, ya que estaría muy orgulloso de verme como Mussona».

Cumpliendo con la tradición que rodea al personaje al que da vida, Mar estuvo acompañada de sus antecesoras en el cargo la noche previa al día de su suelta. Fueron las encargadas de rematar su disfraz con la tradicional 'cosida del rabo'. «Hay mucha trama detrás del personaje, daría para una serie de Netflix», apuntaba entre risas horas antes de la gran cita, a la que llegó «algo nerviosa y muy emocionada».

Estructura con tubos de riego

Mar ha renunciado a muchas horas de sueño desde que empezó a confeccionar su traje hace dos meses, pero el resultado mereció la pena (y la vigilia). Enfiló la bajada del Castillo de Águilas ataviada con una llamativa estructura de 55 metros de diámetro creada con tubos de riego a los que incorporó alambre trenzado en su interior. Un vestuario hecho a base de elementos naturales recogidos de las playas aguileñas de La Casica Verde y El Hornillo con el que simuló ser una morena apoyada en una roca. «Es un pez al que llaman el terror del Mediterráneo». Y miedo dio.

«Hay mucha trama detrás del personaje, daría para una serie de Netflix», destaca la protagonista

Además de usar raíces y bolas de posidonia, esponjas de mar, lapas y pinzas de cangrejo, tiró de la tierra para incorporar a su disfraz de bestia cáscaras de naranja, esparto, pita, hojas secas y semillas como alpiste y cuscús, con las que decoró el casco y la cola, de dos metros. Así consiguió convertirse en la Mussona que siempre soñó, a la que siguió una corte de treinta personas que, con aires tenebrosos, la acompañaron hasta la plaza de España, donde a medianoche se lanzó una traca para que nadie olvide que la Mussona anda suelta y que Águilas celebra su Carnaval.

  1. Diversión y alegría repartidas por todos los rincones de la Región

El Carnaval llenará de alegría y diversión la geografía regional durante este fin de semana. En Cehegín, los vecinos ya tienen preparados los ingeniosos trajes con los que se vestirán para el Mascarón, una fiesta en la que el disfraz más original y satírico se llevará un premio. Será este sábado en la carpa festera de la Gran Vía de la localidad, que por la mañana celebrará el Carnavatón, una carrera popular solidaria en la que los participantes irán con sus mascotas. El domingo los protagonistas serán los más pequeños, con el desfile infantil.

También destaca el Homenaje a las Máscaras en el Recuerdo, que este año rinde tributo a Francisco Fernández, y la distinción de la Máscara del Año 2024, otorgada a María José Abril.

En Mazarrón, donde este año se ha incorporado a la fiesta pagana la figura de doña Cuaresma, el pasacalles de los carnavaleros más benjamines será mañana por la tarde, a partir de las 17 horas. Saldrá de la explanada del antiguo cuartel de la Guardia Civil, como el desfile que el domingo ofrecerán los adultos del municipio. Para que el ritmo no pare y todos los públicos disfruten de la programación, durante todo el fin de semana habrá animación musical con dj, así como talleres infantiles en el puerto deportivo.

El espíritu carnavalero también late fuerte en Puerto Lumbreras y ayer se celebró por primera vez un pasacalles con la participación de dos escuelas de danza del pueblo. La fiesta continúa hoy con el desfile de los escolares del municipio, que llenarán de color las calles.

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